"Outono Fotográfico", el festival gallego de fotografía decano de la Península y el segundo más antiguo del mundo, llega en esta 31 edición por primera vez a Vigo, donde seis salas acogerán siete de las 126 exposiciones del festival.

El evento fotográfico apuesta en esta edición por la consolidación de la Sección Oficial -nacida el año pasado- para equipararlo a otros festivales de todo el mundo. Así, esta sección principal consta de 37 exposiciones que se mostrarán en las siete ciudades gallegas, en Portugal y en Barcelona. El festival no para de crecer y en esta edición gana espacios expositivos sumando ya un centenar. Comisarios como Rui Prata, Ángel Calvo, Carolina Martínez, Manuel Sendón o Tono Arias trabajaron de la mano de artistas nacionales e internacionales de gran prestigio como Martin Parr, Aude Leonard, Antía Moure, David Catá, Xulio Correa, Juan Adrio, Luisa Dörr, Ian Welder, David Alan Havey, Alec Soth, Rosa Muñoz, Félix Fernández y Gaüeca, entre otros muchos.

El director del festival, Xosé Lois Vázquez, recordó ayer -durante la presentación en la delegación del Colegio Oficial de Arquitectos de Galicia en Vigo- cómo su fundador Benito Losada estableció una "sinergia" entre creadores a la que "poco a poco se fueron sumando nuevos fotógrafos que apuntalaron un festival de características muy importantes". Para el director, estas características no son otras que el concepto de "sala expandida" con exposiciones en diferentes puntos geográficos, el concepto de "museo temporal" ,al contener obras de fotógrafos nuevos y consagrados, y la "internacionalización", al establecer lazos con festivales portugueses y brasileños.

El resultado de este trabajo es el intercambio de exposiciones con el Festival Encontros da Imagem de Braga o iNstantes de Avintes (Portugal) o Paraty em Foco de Río de Janeiro, además de la colaboración con el Fòrum Fotogràfic de Barcelona, que continúa.

En la actualidad, los organizadores del festival han tenido que adaptarse y hacer frente al "ruido fotográfico" con la llegada de las cámaras digitales y los smartphones, "que convierten al público en creador", apuntó Vázquez. "Son manifestaciones que se practican sin consciencia pero son muy saludables", destacó el director. De hecho, el Outono Fotográfico ha creado un apartado llamado "Outono Aberto", una convocatoria que, a través de la web, selecciona los trabajos de aficionados a la fotografía.

A esta convocatoria se le suman "Historia da fotografía galega" -una sección dirigida a la recuperación del trabajo de fotógrafos gallegos ya fallecidos- y el I Premio de Fotografía Contemporánea, dotado con 16.000 euros y patrocinado por la Diputación de Lugo y la Xunta de Galicia. El fallo del jurado de este premio se hizo público la semana pasada y recayó en Daniel Díaz Trigo con su proyecto "Posesións para un esquecimento", que será expuesto en el Museo Municipal de Lugo.

Actividades, conferencias, talleres, cursos, acciones y concursos completan el ambicioso programa que cuenta con un presupuesto de solo 22.000 euros.