No hay temporal que no pueda encararse de mejor humor con un buen pulpo y una cunca de tinto. Como prueba, los vecinos que ayer desafiaron al mal tiempo para acudir a la Festa do Pulpo con la que concluyeron en la parroquia de Salcedo las celebraciones en honor a San Blas.

El encuentro tuvo lugar en el recinto ferial bajo una carpa, donde se instalaron los pulpeiros. Éstos sirvieron decenas de raciones, si bien no tantas como en anteriores ediciones, cuando la celebración contó con una media de 300 asistentes.

"El mal tiempo hace que este año la fiesta sea un fracaso", lamentaba Ernesto Malvar, presidente de la Asociación Salcedo Norte, el colectivo que organiza la celebración, "porque con tanta lluvia y viento la gente no se anima a venir".

Con todo, finalmente pasaron por la carpa alrededor de un centenar de personas, en su gran mayoría familias y grupos de amigos, que degustaron la tradicional receta de pulpo á feira acompañada de vino y/o refrescos.

Hasta el pasacalles musical del grupo Os Chichisos tuvo que hacerse bajo la carpa, dado el mal tiempo que caracterizó a toda la jornada.

Asimismo, la procesión se anuló a fin de evitar que la imagen resultase dañada por la lluvia. Este desfile religioso debía salir tras la misa solemne que se ofició en la iglesia a las 13 horas, como colofón a una mañana en la que se sucedieron las celebraciones religiosas desde primera hora.