Acisclo Manzano y Acisclo Novo realizan una exposición en el Centro Cultural de la Diputación mano a mano. Acisclo Novo muestra 74 obras, como homenaje a su padre, Acisclo Manzano, justo en el momento que cumple 74 años de edad. El veterano escultor muestra unas veinte obras, que resumen el trabajo que ha realizado a lo largo de medio siglo de actividad artística. Conforman su colección privada, todas ellas en barro.

Acisclo Manzano define las obras que presenta en el Centro Cultural de la Diputación como "mi historia poética, escultórica, mientras que mi hijo, Acisclo Novo, hace narrativa".

Las veinte piezas que muestra Acisclo Manzano permanecen vinculadas a recuerdos de la infancia del artista en esta ciudad, como los ríos Loña y Miño, Montealegre, el casco antiguo de la ciudad y As Burgas.

Acisclo Manzano reconoce como maestros a Fidias y al Mestre Mateu. Ha elegido el término Acisclo para presentarse ante el mundo, el nombre que recibían los escultores de Grecia y de Roma, porque la maza que utilizaban se llamaba acisclo. Por lo tanto "yo me llamo escultor: Acisclo escultor".

Acisclo Manzano reconoce que siempre ha sido feliz con su trabajo y con su escultora. "La escultura es mi nombre, mi vida. Me siento escultura. No me da trabajo elaborar una pieza, porque yo soy escultura. Yo le debo mucho a la escultura, que me ha dado todo. Estamos hermanados, estamos unidos, fundidos. Yo soy un escultor escultura, poético".

A través de la escultura, Acisclo Manzano intenta expresar distintos acontecimiento que han transcurrido durante su vida y en la sociedad de su entorno. "La escultura es como la poesía. Con un trazo se cuenta una gran historia. Yo estoy contando la historia de mi vida y de esta ciudad".

Tras cinco décadas de actividad artística, Acisclo Manzano reconoce que todavía aspira a hacer la gran obra de su vida. "Puede ser una pieza del tamaño de una nuez, que resuma todo lo sucedido hasta ahora", confiesa.

Acisclo Manzano contempla a Acisclo Novo como otro escultor de "gran calidad", que "lleva otras formas, otro camino. Recurre a la narrativa, mientras que yo hago poesía" escultórica. "Me gusta mucho la obra que hace, con gran realismo. Yo no sé hacer ese tipo de escultura, porque siento otras sensaciones".