Lalín y Silleda se han sumado a la cadena creada a través de Facebook bajo el sobrenombre del "Legado de Tibu" para desafiar, sobre todo, a su clase política a mojarse en el más amplio sentido de la expresión. El vecino de Lalín, Daniel Antelo, nominó en la mañana de ayer al alcalde de la localidad José Crespo, al socialista Nicolás González Casares y a Rafael Cuiña Aparicio, de Compromiso por Galicia, a sumergirse en el agua para contribuir a una buena causa en un plazo máximo de 48 horas. Aunque el juego castiga al que no cumple el reto con el pago de una mariscada, Antelo propuso a sus tres nominados a contribuir con una aportación para el Banco de Alimentos del municipio. Cuiña fue el primero en cumplir sumergiéndose por la tarde en un estanque situado dentro de la propiedad familiar de Filgueira y colgando poco después el instante en su muro de Facebook. Mientras tanto, tanto González Casares como José Crespo meditan la manera en la que cumplir con el desafío de su convecino.

De todas formas, el regidor municipal, que se enteró de la existencia del juego por esta Redacción, tenía al cierre de esta edición un nuevo reto por delante procedente de su propio equipo de gobierno. El teniente de alcalde lalinense, Román Rodríguez, que a su vez fue nominado por la edil de Vilatuxe Sara Fernández junto a José Antonio González, cabeza visible de la gestora del Club Deportivo Lalín, tenía previsto lanzarle el reto al primer edil. Crespo apuesta por realizar de forma conjunta "y un sitio discreto" la prueba de zambullirse junto al resto de miembros el gobierno municipal entusiasmados con el fenómeno del "Legado de Tibu". En cualquier caso, el alcalde de Lalín piensa que lo más fácil será aportar una caja de alimentos para cumplir con el reto lanzado por Daniel Antelo, "al que no conozco porque no tengo ningún trato con él, aunque lo tenga de amigo en el Facebook", asegura. Mientras tanto, el regidor lalinense medita a quién nominar para sumarse al fenómeno viral y no descarta incluir a varios representantes de la prensa local.

Mención especial merece el caso de la senadora silledense Paula Fernández Pena, que se enteró de su nominación mientras participaba en el pleno del Senado de ayer. En este caso, la exalcaldesa de Trasdeza fue retada por su amiga de Facebook, Andrea Guerra, que previamente se sumergió en las frías aguas de la playa fluvial de A Carixa para certificar el cumplimiento del desafío por su parte. Paula Fernández no tardó en mostrar su asombro y bromeó diciendo que "estoy en Madrid en las próximas 48 horas y en el Senado, de verdad, no tenemos piscina". La senadora emplazó a su desafiante amiga a hablar del asunto a su regreso a Silleda, siempre en clave de humor.

Sea como fuere, lo cierto es que el "Legado de Tibu" está haciendo estragos en una de las redes sociales más pobladas del mundo, y la comarca dezana no es ajena al fenómeno. Habrá que ver quién es el próximo político de la zona que estará obligado a mojarse.