SANDRA PENELAS | VIGO

Coruxo se convirtió ayer en un circuito urbano para acoger la segunda edición de su Bajada de Carrilanas. Numeroso público se congregó a lo largo de los 1.300 metros del recorrido para disfrutar con la habilidad de los pilotos para manejar sus carros de bolas, bicicletas y monopatines durante el sinuoso descenso.

El Centro Recreativo, Artístico y Cultural de Coruxo se encargó de la organización de esta prueba puntuable para el campeonato gallego y en la que compitieron medio centenar de pilotos en un total de 6 categorías de deporte de inercia.

El trazado, que fue modificado respecto a la edición de 2013 para facilitar el acceso del público, discurrió entre San Sebastián y Tintureira, donde aguardaba la línea de meta a los audaces pilotos.

Ya recuperados del esfuerzo, la entrega de premios tuvo lugar en el CEIP A Paz. Los mejores tiempos fueron para Iván Rial Dosil, de la escudería Inercia Kamikaze, en la categoría de Drift Trike; Francisco Campos Araújo, de Team Cronos Sport, en Gravity Bikes; Abel Fernández Fernández, Correasport, en carrilanas neumáticas; David Alves Pinto Santos, Rolinhos, en categorías ligeras; David Gómez Cabanelas, Agecar, en madera; y Jacobo Bastos Vicente, de CMC Speeddown, en carrilanas con rodamientos.

Los aficionados todavía disponen de otras dos citas antes de que finalice la temporada de la Federación Galega de Deportes de Inercia en la comunidad. El próximo descenso tendrá lugar en Bembrive el día 30 y la despedida hasta el próximo año será en Baiona el 7 de septiembre.