El Entroido de Baiona celebró un doble acto en la tarde de ayer con el desfile de comparsas y el Entierro de la Sardina. La actividad comenzó pasadas las 17.00 en Sabarís y finalizó sobre las 20.00 horas en la playa de Ribeira. Las previsiones meteorológicas obligaron el pasado lunes a trasladar al miércoles el desfile de comparsas que estaba programado para el martes.
De esta forma, la sardina no salió desde la Praza del Concello como estaba previsto y completó también todo el recorrido desde Sabarís, pasando por Santa Marta, Monterreal y Elduayen hasta acabar en la playa de Ribeira, donde se procedió a su quema. Hubo un total de veinte comparsas inscritas y los premios irán desde los 900 euros para la ganadora hasta los 650 euros para lo según clasificado y 500 para el tercero. Entre las demás comparsas participantes, se repartirán el resto de los premios (4.450 euros) que se distribuirán de acuerdo con el número de componentes: de 81 a 100 componentes (500 euros), de 61 a 80 (400), de 41 a 60 (300), de 21 a 40 (200) y de 12 la 20 componentes (100).
El jurado estuvo integrado por personas del mundo de la cultura, el deporte, la música, o a las letras, designadas por el Ayuntamiento y valoró, entre otros aspectos, los disfraces, máscaras y los maquillajes acomodados a la temática que representaran originalidad, ingenio, caracterización, instrumentalización, etc.
El primer premio de esta edición fue para la comparsa Talismán, procedente del municipio de Salceda de Caselas. El segundo puesto del podio lo ocupó la comitiva tomiñesa Ciclón. Las otras 18 también fueron reconocidas siguiendo los criterios previamente mencionados.
De este modo el municipio despidió a lo grande una nueva edición de Entroido, con una veintena de grupos que dieron color a todo el casco urbano baionés y con una climatología que, sin ser la más idónea, permitió que el evento se desarrollara con normalidad.
La duración del desfile rondó las tres horas. Ya en torno a las 20.00 horas daba comienzo el Entierro de la Sardina, que en este caso sí que se celebraba tal y como estaba programado en el calendario diseñado por el Consistorio para estas fechas de disfraces y diversión.
Un broche que viene a confirmar la buena forma de la que goza el carnaval de la Real Villa y que pone el Entroido baionés, un año más, en el mapa de los más concurridos del área metropolitana de Vigo.
