AGATHA DE SANTOS | VIGO

El autobús de "Priscilla, reina del desierto" está a punto de llegar a Vigo, encabezado por el actor ourensano Christian Escuredo, que encarna a Felicia, la más joven del trío de artistas drag queens que protagoniza el famosos musical y que interpretan José Luis Mosquera (Bernadette) y Jaime Zatarán (Tick). "Priscilla, reina del desierto" estacionará en el Auditorio Mar de Vigo el próximo día 23, donde permanecerá hasta el 26, tras conquistar a más de medio millón de espectadores en toda España. El espectáculo repasa la música disco de los noventa "a golpe de plataforma", con temas tan conocidos como "It´s raining men", "Don´t leave me this way", "I will survive", "Finally" y "I love the nightlife".

El cuarto protagonista de esta superproducción es el autobús de 9 metros de largo por 2,4 de ancho y algo más de 3 metros de alto, que se transporta desmontado en piezas en varios camiones, el mismo autobús que pudo verse en los espectáculos de Londres y Madrid, y que viajó desde su último destino en Israel para ponerse al servicio de la gira española.

Este espectáculo, inspirado en la película australiana "Las aventuras de Priscilla, reina del desierto", dirigida por Stephan Elliott en 1994, cuenta con cuarenta artistas sobre el escenario, ataviados con 500 vestidos, entre los que no faltan las plumas, lentejuelas y llamativos estampados; 150 pares de zapatos, incluidos las plataformas; y 200 pelucas, tocados y sombreros, el mismo vestuario que se llevó un Óscar en la gala de los premios del cine de ese año. Solo el vestuario requiere dos tráileres para su transporte y un equipo de nueve personas de sastrería a las que se unen contrataciones locales. Los actores emplean 250 máscaras hechas a medida para ellos y pintadas a mano, un kilo de purpurina y 40 barras de labios al mes.

"Hay más coreografía fuera que dentro del escenario.Los cambios son tan rápidos que en algunos casos se hacen en cinco o seis segundos, en un abrir y cerrar de ojos", explica Juanjo Rivero, productor del musical. Y es que, en "Priscilla, reina del desierto", todo es vertiginoso, dentro y fuera del escenario. Especialmente complejos son los momentos en los que los protagonistas se travisten en drag, con trajes en ocasiones muy voluminosos, como en la escena en la que las tres protagonistas crean el aspecto de la Ópera de Sídney con sus trajes. "Hemos tenido que construir contenedores especiales para poder trasladarlos", comenta Rivero.

A los dos tráileres de vestuario se suman otros dos de escenografía -tiene 23 cambios de escenografía-, otro de atrezzo y utilería y otros dos de iluminación. Con ellos viajan 37 técnicos, a los que se sumará el personal contratado en Vigo y el del propio Auditorio Mar de Vigo.

Otra seña de identidad de este musical es que las canciones que tienen que hacer en play back Felicia, Tick y Bernadette son interpretadas en directo por tres cantantes, que aparecen en escena suspendidas en el aire por medio de un sistema de arneses. Y han de hacerlo con elegancia y clase, y manteniendo la verticalidad.