El tobogán acuático instalado en Navia con motivo de las fiestas de verano recibió a unas tres mil personas diarias durante los cinco días en los que estuvo operativo. Inicialmente el tobogán iba a funcionar solo el viernes pero la gran expectación que causó, con colas de hasta dos horas para deslizarse sobre hinchables a través de sus 125 metros, hizo que el Concello lo prorrogase hasta el domingo y, de nuevo, hasta ayer, martes. Según la empresa, en los cinco días en los que estuvo instalado pasaron por lo tanto unas quince mil personas, entre niños y adultos.