No deja de ser un producto interesante, sobre todo en la primera mitad, la que se circunscribe a contar el vertiginoso ascenso en el ejército nazi del cruel y sádico Reynhard Heydrich, el jefe de la SS y tercer dirigente en el aspecto protocolario del Tercer Reich. El problema que tiene es que la historia que cuenta, el atentado contra el citado Heydrich por parte de la resistencia checa afincada en Inglaterra durante la segunda guerra mundial, ha sido llevada al cine en varias ocasiones, la última de las cuales, antes de la que ahora llega a los cines, 'Operación Anthropoid', la vimos el pasado año y estaba realizada por Sean Ellis en 2016. Sin olvidar, asimismo, la versión de 1975, 'Siete hombres al amanecer', que dirigió Lewis Gilbert.

'El hombre del corazón de hierro' tiene momentos de innegable impacto y aporta algunas cuestiones inéditas, pero la descripción del enfrentamiento entre los resistentes y los nazis, en la iglesia de un pueblo de los alrededores de Praga, es demasiado conocida y carece, por ello, de la necesaria intensidad dramática. Con este panorama, no resulta sorprendente que la parte más destacada de la cinta que ahora se estrena, dirigida por el cineasta galo de origen español Cedric Jiménez, que ha vivido en Estados Unidos durante largo tiempo, sea la que está vinculada al siniestro líder de la policía política del Fuhrer.

Es la adaptación cinematográfica de la novela 'HHhH', de Laurent Binet, centrada en un seguimiento del protagonista desde la óptica de un ser despiadado que fue instruido en las teorías racistas por su bella y adinerada esposa Lina. Su ascensión fue vertiginosa, gozando de la máxima confianza de Hitler, y fue responsable de la denominada 'Solución Final', encaminada al exterminio de los judíos. También insiste en los entresijos de la operación que hizo posible algo increíble, el asesinato del jerarca de mayor graduación en todo el periodo en el poder del nazismo.