Formol 105, cortometraje de animación dirigido por el vigués Martín Rodríguez, participa en el Festival de Málaga que comenzó ayer. Con música de con música de Pablo Novoa (Golpes Bajos, Iván Ferreiro), Formol 105 nace como un cortometraje de animación adulta sobre conceptos tan dispares como el amor y la muerte (Eros y Tánatos), la autoafirmación de la sexualidad y el paso del tiempo. El cortometraje dura apenas cinco minutos y carece de diálogos.

"Siempre he creído en la atmosfera como un personaje muy importante dentro de las estructuras fílmicas. Sobre todo en historias que no se apoyan en el diálogo, como es este caso", explica. Todo debe jugar un papel para intentar crear en el espectador una "experiencia" visual", explica el director de este corto, producido por Deboura Cinema.