Haciendo gala de ese minimalismo extremo que caracteriza la última película de Christopher Nolan, 'Dunquerke', las últimas palabras de su director han ido mucho más allá. Y es que, pese a contar con escasos diálogos y desenvolverse en pocos escenarios, la idea inicial de Nolan era la de rodar todo el filme sin guión.

Tal y como confirmó en una entrevista que le realizó su hermano Jonathan Nolan y que recoge The Hollywood Reporter, el director de películas como 'El truco final' u 'Origen' afirma que llegó "a un punto en el que entendí el alcance y el movimiento y la historia de lo que quería que la película abordara, porque es una geografía muy simple".

Al parecer, el cineasta se vio tan inmerso en los detalles de 'Dunquerke' durante el proceso de producción, que se planteó la idea de iniciar el rodaje con un método libre de secuencias de comando. Es decir, sin guión. "Yo dije", cuenta Nolan a su hermano, "no quiero un guión, porque sólo quiero mostrarlo. Es casi como si lo quisiera poner dentro de la escena, en la película".

Una idea totalmente anormal para el director y escritor, por ejemplo, de 'Interstellar' o 'Memento', filmes que dependen por sobre todo de los diálogos. Sin embargo, parecía que 'Dunquerke' necesitaba de un Nolan que nadie había visto hasta ahora. Él lo explica así: "sentí que de esa forma dominaba".

Sin embargo, por fortuna o por desgracia, los productores de 'Dunquerke' no tardaron en quitarle la idea de la cabeza. En particular, su esposa Emma. "Me miró como si estuviera un poco loco y pensé que, de acuerdo, eso realmente no va a funcionar", relata Nolan. Y, al final, accedió. Pese a todo, el guión de 'Dunquerke' es, con 76 páginas, es de los más cortos de todos los escrito por Nolan.