Después de la repentina muerte de Terele Pávez el pasado viernes, el mundo del cine está de luto. Sin embargo, todos los que la conocían coinciden en lo mismo: su extraordinaria personalidad, su calidad humana y su manera de sobreponerse a las adversidades que pasó a lo largo de su vida, que no fueron pocas.

Aunque Terele ha sido una de las grandes actrices del cine español, alzando el Goya en 2014 por 'Las Brujas de Zugarramurdi', no siempre estuvo al lado del éxito. La actriz paso unas etapas complicadas debido a la falta de trabajo y problemas económicos, pero incluso en los momentos más difíciles de su vida conseguía ser "luz" tal y como confiesa su hijo.

"Me siento totalmente privilegiado de haber compartido 44 años de su vida. No podría explicarla con detalles. Ella fue un caos capaz de generar un parque de atracciones. Es inexplicable. ¿De verdad he tenido esta madre? Me lo creo porque lo he vivido" nos comentaba Carolo Ruiz, hijo de la actriz, a las puertas de la capilla ardiente de su madre.

Para agradecer las muestras de cariño y afecto, Carolo ha compartido un vídeo a través de sus redes sociales confesando la gran enseñanza que le deja su madre: "ser felices con cada instante de vuestra vida. Con este dolor tan grande, ser feliz y disfrutar de tener esta vida que me dio ella para poder sentir estas cosas, para poder tener algo tan hondo".

Además, ha compartido una tierna anécdota que descubre como era realmente Terele: "Lo mejor que puedo contar ahora mismo es que, una vez en un momento muy, muy delicado para ella, no estaba nada bien, lo estábamos pasando muy mal, alguien le preguntó '¿cómo te encuentras ahora?', y ella me miró, la miró y dijo: '¿que cómo estoy? Fíjate si estoy bien que tengo sentimientos'. Por apenado que uno esté, es maravilloso poder sentir. Sed felices. Sonreídla. Sonreíros. A mí me vais a tener por aquí un rato más. Nos vemos por la vida. Gracias de corazón". Así la veía su hijo y así la definen todos aquellos que tuvieron la suerte de conocerla, una mujer positiva incluso en los peores momentos.