"Jupiter's Moon", del húngaro Kornél Mundruczó, se ha alzado con el Premio a la Mejor Película del 50 Festival de Cine Fantástico de Cataluña, mientras la cinta de ciencia ficción "Thelma", del noruego Joachim Trier, ha conseguido el Premio Especial del Jurado.

Así lo ha anunciado hoy en rueda de prensa el miembro del jurado de la Sección Oficial, Gary Sherman, quien ha señalado que "Thelma" se lleva también el galardón al Mejor Guión, que comparten el director y Eskil Vogt, mientras "Jupiter's Moon", donde el protagonista levita sobre la ciudad de Budapest, consigue además el reconocimiento a los Mejores Efectos Especiales.

Por su parte, el público ha introducido la única película española premiada en el palmarés, "Matar a Dios", de los tarraconenses Pintó & Caye (Alberto Pintó y Caye Casas), que también consiguen el premio al mejor cortometraje con "R.I.P.".

El jurado, que ha votado por unanimidad a la película ganadora, ha reconocido que cambiaron sus preferencias ayer mismo, ya que la película fue de las últimas proyectadas.

El Premio José Luis Guarner, que concede la crítica, ha recaído ex aequo en la cinta brasileña "As Boas Maneiras", de Juliana Rojas i Marco Dutra, y "The Killing of a Sacred Deer", el salto al cine de género del griego Yorgos Lanthimos.

Tráiler de 'The Killing of a Sacred Deer'. Vídeo: YouTube

"En la contradicción están las explicaciones"

Con guión de Kata Weber, con la que el director ya trabajó en "White God" (2014), ganadora de 'Un certain regard' en Cannes, "Jupiter's Moon" habla de libertad, de "levantar la mirada hacia el cielo", dice Mundruczó, pero sobre todo "es un reflejo del momento histórico que vivimos, en los que en la contradicción es donde están las explicaciones".

"Y en esta película hay muchísimas contradicciones, todas las del mundo, bajo el mismo paraguas del milagro", explica.

El director, que ya trató el tema sobrenatural en su película "Johanna", Giraldillo de plata del Festival de Cine Europeo de Sevilla en 2006, usa en esta ocasión a un joven refugiado capaz de levitar para hablar de dilemas eternos, entre ellos, la capacidad de empatizar con el diferente, o simplemente, del miedo.

"Hungría está plagada de situaciones como la que se vive hoy en Cataluña, de miedo a lo desconocido, y eso se come el alma. Las cosas que están pasando son muy tristes, pero en mi opinión son problemas causados por el populismo, que para mí es el mayor enemigo", ha considerado.

Mientras las "ideologías de siempre -ya sean de derechas o de izquierdas, da igual- no dan una respuesta relevante a los tiempos de hoy, los populistas sí. Y esto genera enemigos, además de provocar una enorme inseguridad. Eso lo podemos ver igual con Trump, en EEUU, o en un reality show".

La película sigue a un joven sirio, Aryan Dashni(Zsombor Jéger), que acaba tiroteado cuando trata de cruzar ilegalmente la frontera de Hungría; los tiros no solo no le matan sino que le confieren el extraño poder de levitar.

Escondido en un campo de refugiados, un médico que necesita dinero imperiosamente ve un filón en el joven, al que trata de explotar como "ángel" milagroso.

"El doctor Stern (Merab Ninindze) es un personaje muy complejo, es un corrupto, no sabemos qué pasó para destrozar su vida, pero el caso es que es un alma perdida; a la vez, parece un gran tipo, tiene encanto. En realidad es un producto del sistema, hay miles como él, cada paso que da está cargado de todos los conflictos que arrastra".

Ambos son ejemplos de esas contradicciones que fascinan a Mundruczó. Y junto a ellos, un terrorista suicida, que pasa la frontera al mismo tiempo que el chico.

"Me enfadan las películas que simplifican todo -afirma Mundruczó-. Esta crisis es muy compleja y nos hace sentir una enorme presión; en mi lenguaje cinematográfico quiero sumergir al espectador en ese caos, que el terrorista y el ángel lleguen juntos, porque los hemos creado a los dos, son nuestro espejo, nos estamos viendo a nosotros mismos".

Así, a modo de espejo, la película es a la vez una crítica feroz a Europa.

De hecho, "Jupiter's Moon" es una referencia "poética" a Europa, la única de las cerca de 70 lunas de Júpiter que podría albergar vida.