Carlos Areces es divertido, tal y como uno espera de uno de los cómicos más aplaudidos de nuestro país. Ahora rueda ´El Pueblo´, la nueva serie de los hermanos Caballero, creadores de ´La que se avecina´, pero estos días hace un parón para promocionar su nueva película ´La Higuera de los Bastardos´, dirigida por Ana Murugarren y en la que interpreta a Ermo, un ser "deleznable" que le enamoró.

En sus palabras se ve que su trabajo le apasiona. Nos dice que Ermo le ha causado algunas inseguridades, señal de que se ha dejado la piel para dar vida a un personaje muy diferente de los que suele interpretar y que podemos ver en la gran pantalla a partir de este viernes.

¿Por qué dijiste que sí a ´La Higuera de los Bastardos´?

Me ofrecieron otro papel, pero dejaron caer la posibilidad de hacer Ermo y el personaje me enamoró a pesar de ser repugnante y repulsivo. Pero hacer el papel de villano siempre apetece más.

A pesar de ser un drama, parece una película divertida.

No es una comedia como las que estamos viendo últimamente. Es una película amarga e incluso incomoda, pero en determinados momentos las situaciones son tan patéticas que te hacen soltar la carcajada.

Eres el protagonista junto a Karra Errejalde, ¿cómo ha sido rodar juntos?

Karra me imponía al venir de hacer grandes taquillazos. Es agresivamente extrovertido, no para de hablar y enseguida hicimos migas. Me ayudó durante todo el rodaje, sobre todo en los momentos más complicados en los que yo tenía que lidiar con una dentadura postiza o poner acento vasco. En algunos momentos tenía inseguridades y él me ayudó a superarlas.

¿Han sido estas trabas lo más duro del rodaje?

No, lo más difícil ha sido trabajar de noche y con lluvia, tanto la de atrezo como real. Estar mojado casi 10 horas es complicado.

¿Por qué hay que ir a ver ´La Higuera de los Bastardos?

Podría decir que por cariño hacia mí y porque así me llamarán para hacer más películas pero hablando en serio, por la curiosidad de ver una cinta inclasificable. Ese es uno de sus grandes valores. No se parece a nada de lo que hay actualmente en la cartelera, así que va a sorprender.

¿Es esta tu mejor película o interpretación?

Solo la he visto una vez y no me fijé en la película sino en todo lo que como actor no quisiera que estuviese allí. Es algo que a todos nos pasa cuando nos vemos por primera vez en un papel. Eso sí, Ermo es uno de los papeles que más he disfrutado. Lo que te supone un esfuerzo es lo que más satisfacción te produce.

Tu nombre suena en las quinielas para los nominados a los Goya.

Creo que son rumores infundados pero los premios siempre gustan. Lo más duro es cuando te nominan y el galardón se lo dan a otro y tienes que desplegar todas tus dotes para que no se vea tu frustración y rabia. Es tener que hacer la mejor interpretación de tu vida cuando todo el mundo está pendiente de ti. ¡Si me nominan y no me dan el Goya, no pienso disimular!

Eres un cómico muy popular, pero tienes otras facetas menos conocidas. Cuenta la leyenda que empezaste como dibujante, vendiendo caricaturas de tus profesores a tus compañeros.

Mi gran afición era el dibujo y el dinero. Les cobraba 15 pesetas a mis compañeros por ellas. Cuando reunía 120 pesetas me compraba en el bar unos perritos calientes con pan tostado.