El helado, además de ser un postre de lo más suculento, puede convertirse en el mejor aliado para soportar el calor veraniego. Disfrutar en el propio hogar de un delicioso helado casero es mucho más fácil de lo que se podría pensar sin necesidad de disponer de una heladera y con la ventaja de controlar los ingredientes que se utilizan, evitando los conservantes, grasas baratas y similares, típicos de las versiones comerciales y muy poco recomendables para la salud.

Existen multitud de recetas para realizar la crema base del helado al gusto y una vez esté lista la mezcla, bastará con seguir uno de estos tres sencillos métodos de cómo hacer helados caseros sin heladora que se presentan a continuación. Pero antes, un par de consejos a tener en cuenta: al no llevar conservantes, los helados caseros se deben consumir en pocos días y al hacerlo, lo mejor es sacarlos del congelador entre 15 y 20 minutos antes de servirlos para que tengan una textura más suave.

Para el primer método de cómo hacer un helado casero se coloca la crema, tras dejarla enfriar bien, en un recipiente con tapa de plástico o acero inoxidable y se congela. Unos 45 minutos después hay que removerla con una espátula o con varillas para deshacer los cristales de hielo que se hayan formado y volver a meterla en el congelador. Durante las siguientes dos o tres horas habrá que repetir el proceso cada 30 minutos hasta que el helado se congele.

Otra manera menos tediosa que la anterior de conseguir un buen helado casero es utilizar un bol grande lleno de cubitos de hielo en el que se introduce la crema base en otro recipiente más pequeño bien rodeado por los hielos. La mezcla se bate con una batidora de mano durante diez minutos, antes de meter ambos envases en el congelador. A los 45 minutos se vuelve a batir la mezcla durante cinco minutos hasta que adquiera una textura cremosa y suave. Después, se retira el bol con hielos, se cubre la crema con film de cocina de manera que quede bien pegado a la superficie y se retorna al congelador durante unas horas hasta que se congele.

El último método de cómo hacer un helado casero consiste en utilizar cubiteras o bolsas de hielo en las que se introduce una crema base elaborada a partir de huevos, leche evaporada y azúcar. Estas cubiteras o bolsas se congelan durante cuatro horas o hasta que la mezcla se solidifique, tras lo que se trituran los cubitos y se mezclan con medio litro de nata montada durante medio minuto. Se vierte la nueva mezcla en un recipiente y se introduce en el congelador durante otras cuatro horas al menos.

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