Un año más, y ya van veintiuno, la Fiesta del Mejillón volvió a colgar el cartel de completo. Y es que las largas colas que se formaron en los aledaños del parque de Castrelos desde primera hora de la mañana hacían presagiar el buen comer y el aprecio de los vigueses por este simbólico molusco. Los 3.000 kilos de mejillón recogidos para la ocasión fueron vendidos en su totalidad llegando a servirse más de 5.000 raciones entre los cientos de comensales que se dieron cita en el parque.

Y es que si algo primó en esta celebración, como debe de ser, es ensalzar el mejillón en todas sus variantes. Ya sea al vapor acompañado por unas gotitas de limón como en empanada junto a un buen vino como maridaje, e incluso en formato galardón. Sus organizadores, la Federación de Peñas Recreativas El Olivo entregaron este año el "Mexillón de Ouro" al concejal Santos Héctor, quien junto también al alcalde de la cuidad, Abel Caballero, agradeció el detalle además del buen hacer del festejo.

Si ya por si solo el producto era exquisito, el tiempo también acompañó, ya que se mantuvo un día bastante soleado hasta ya entrada la tarde. Y como en toda buena fiesta tampoco faltó la música, que corrió a cargo del grupo de baile y gaitas Xuntanza y de la banda de música tradicional "Os do Viveiro". Por su parte, el pregón corrió a cargo del pintor Mingos Teixeira, que abrió la ronda de intervenciones que finalizó con la entrega del Mejillón de Oro al concejal Santos Héctor.

Ya con los estómagos a rebosar y con la alegría de una jornada entre amigos, a los asistentes solo les restan 654 días para una nueva Fiesta del Mejillón.