El régimen diario de una persona debe ser lo suficientemente rico y variado como para que el organismo reciba todas las sustancias nutritivas básicas que se encuentran en los alimentos.

Por eso, la dieta basada en las verduras, las legumbres, las patatas, la pasta, el pescado, el pan y las frutas es la que más se acerca al prototipo de comida sana, por lo que sería un grave error abandonarla.

Te enseñamos cómo prepara un bacalao a la crema de espárragos y pimientos:

Así se prepara: 435 kcal

En una cazuela con un poco de aceite, se fríe la cebolla y el pimiento, ambos picados menudos, y el ajo laminado; cuando la cebolla esté pochada, y sin que el ajo se queme, se añade la mitad de leche y los espárragos limpios y troceados, y se deja cocer a fuego lento.

En el resto de la leche se disuelve la harina de maíz y se vierte en la cazuela cuando los espárragos estén tiernos; cuando empiece a espesar, se añade la nata líquida y se sazona con nuez moscada y sal.

En ese momento se incorporan los lomos de bacalao desalado, y se deja cocer a fuego lento con la cazuela tapada hasta que el pescado esté tierno. Dos o tres minutos antes de retirarlo del fuego, se espolvorea con perejil.

Ingredientes para 4 personas

4 lomos de bacalao desalado, 1 cebolla, 250 g de espárragos verdes, 1/2 pimiento rojo, 2 dientes de ajo, 1 vasito de leche, 1 vaso de nata líquida, 2 cucharadas de harina de maíz, perejil picado, nuez moscada, aceite de oliva, sal.

El consejo: La sal

La sal es un compuesto químico formado por cloro y sodio. Hay varios tipos en el mercado:

Sal refinada, que contiene cloruro sódico.

Sal marina, que además de cloruro sódico contiene yodo, magnesio y prácticamente todos los oligoelementos.

Sal gema, que es la sal de montaña que contiene cloruro sódico y puede presentarse en forma de cristales

Sal yodada, que es la sal gema a la que se le ha añadido yodo.

La más recomendable es la sal marina sin refinar. También existe una variedad denominada sal marina celta, que es muy rica en minerales de fácil absorción, por lo que las personas con dietas para el control de la función renal deben tomarla con precaución, al igual que las personas con tratamientos antihipertensivos.