La cerveza artesana está de moda. Los kits para elaborarla en casa se han convertido en el regalo perfecto para los amantes de esta bebida y las microcerveceras van surgiendo poco a poco en las cuatro provincias gallegas.

La primera factoría nacida en Vigo (y la tercera de Galicia) es De Lago. Creada en 2011 por Javier Acosta, es desde el pasado 8 de agosto parte del binomio que conforma el primer brew pub de la ciudad:_La Pinta, La Niña y la Santa Garimba. Los brew pubs son locales donde es posible beber la cerveza que allí se elabora. En la calle Teófilo Llorente, en pleno Casco Vello vigués, se ubica la microcervecera y, al lado, la cervecería, gestionada por María Villar.

"Le ofrecemos al cliente la posibilidad de degustar una cerveza 100% artesana, natural y recién hecha", apunta Acosta, quien actualmente elabora tres variedades: "Mi morena", una cerveza tostada con toques dulzones, de poco amargor y sencilla de beber;_"Tío Chisco", una rubia muy fresca, perfecta para esta época del año;_y "Sweet Smoke", de estilo porter con un toque ahumado al final. Esta última marca es una receta conjunta de Acosta y José Severiano, propietario de Sevebrau, fábrica de cerveza artesana de Villanueva de la Serena (Badajoz), medalla de bronce en el International Beer Shangai Festival de este año y maestro del fundador de De Lago. "Los elaboradores caseros van en aumento. Es un proceso sencillo, pero conseguir una buena cerveza requiere más complejidad", señala Acosta, quien lleva más de un lustro dedicado al arte de fabricar cerveza.

Por el momento, la única marca que embotella es "Mi morena". Las otras dos solo es posible beberlas en La Pinta, donde se dispensan directamente del grifo. "Al ahorrarnos la botella, el chapado y la etiqueta, podemos venderas al mismo coste que una industrial", afirma.

Son cervezas artesanas y naturales, dos aspectos que Acosta cree conveniente diferenciar. "Un producto natural, es decir, sin aditivos, puede estar elaborado con métodos industriales. En cambio, el modo de producción de nuestras cervezas es completamente artesanal. Así, la infusión se lleva a cabo removiendo de forma manual con una pala el empaste (mezcla de la malta y el agua)". En la microcervecera viguesa, incluso las máquinas han sido diseñadas y creadas por Acosta. "La carbonatación no es más que un compendio de reacciones químicas que hacen fermentar la cerveza dentro de la botella produciendo gas. Embotellamos también a mano, pegamos las etiquetas, etc.", describe.

Preguntado por el boom que está viviendo actualmente la cerveza artesana, Acosta opina que se trata de un público que busca sin descanso cosas novedosas. "Siempre quieren variedad, probar algo nuevo, por eso no suelen ser muy fieles a las marcas", afirma.

Esta es una de las razones por las que creó "Tío Chisco". "Es una cerveza que se intenta asemejar un poco a lo comercial, con esa parte fresca que permite a nuestros clientes estar en La Pinta cañeando tranquilamente, disfrutando de una cerveza artesana a un precio asequible", explica.

En el mes que llevan abiertos están satisfechos con la respuesta de la gente. "La clientela que tenemos ahora mismo está repitiendo", apostilla.