El restaurante Culler de Pau, gestionado por el chef Javier Olleros y distinguido con una estrella Michelin, seguirá en funcionamiento. La sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) que anula la licencia disponible no va a frenar el funcionamiento de este establecimiento, tal y como garantizan tanto la propia empresa como el Concello de O Grove.

Desde el popular establecimiento ubicado en Reboredo aseguran que "no se rinden" y hablan de "un claro ejemplo de persecución" por parte del empresario Óscar Miniño, que durante los últimos años se ocupó de presentar todo tipo de denuncias contra este negocio y además de lograr cerrarlo en una ocasión estuvo a punto de hacerlo desaparecer definitivamente.

También el alcalde meco, José Cacabelos, apunta hacia una "persecución descarada por parte de Miniño contra Javier Olleros, su restaurante y contra mi y el PSOE, y todo porque nosotros lo denunciamos a él por las irregularidades urbanísticas que ha cometido con sus obras y sabe que el chef del Culler de Pau es hermano del que fue concejal socialista Jorge Olleros".

Tal es "la caza de brujas" que "casi estoy por ponerle un despacho -ironiza Cacabelos-, ya que Miniño se pasa los días en las oficinas municipales rebuscando papeles y obstaculizando la labor administrativa; parece que pretende que los funcionarios solo trabajen para él".

Dispuesto incluso a pedir un informe jurídico "para determinar si Óscar Miniño entorpece o no la labor del Ayuntamiento", el primer edil garantiza que los problemas detectados por el TSXG "son fácilmente solventables", por eso considera que "con unos retoques mínimos el restaurante podrá pedir una nueva licencia y desde el Concello se la concederemos".

Entrando de lleno a valorar la sentencia del TSXG, de la que informó FARO, José Cacabelos declara: "Me sorprenden a veces las decisiones judiciales porque se falló en primera instancia con una resolución de más de treinta páginas que echaba por tierra todo lo argumentado por Miniño, y ahora resulta que el TSXG admite parcialmente el recurso del empresario y anula la licencia en dos cuestiones que resultan igual de sorprendentes para los técnicos y abogados que hemos consultado".

Y es que el alto tribunal "cuestiona la legalidad del restaurante por el fondo del edificio, al dudar sobre si la plancha solar se puede considerar edificación u ornamentación, cuando se presentaron pruebas de que no computaba y de que se trata de apenas cincuenta centímetros, por lo que me pregunto dónde está la proporcionalidad de las sentencias".

Además el TSXG "dice que se excede la altura por un vuelo que no guarda una distancia de 60 centímetros respecto a otro, cuando resulta que la forma de computar la altura no es la que usa el ponente del TSXG, que aplica criterios de suelo urbano en vez de hacerlo como suelo rural".

En cualquier caso "es cierto que anula la licencia y al Culler de Pau no le queda otra que solicitar una nueva corrigiendo esos dos aspectos que cuestiona el TSXG; pero insisto en que son totalmente subsanables porque se trata solo de eliminar una pantalla solar y recortar los vuelos".

El alcalde termina refiriéndose nuevamente al empresario Óscar Miniño para decir que "todos conocemos en este pueblo quién es esta persona, a qué se dedica y cómo funciona, pues curiosamente se dedica a acusar y denunciar a todo aquel que no es de su cuerda cuando él es el primero en incumplir las normas urbanísticas".

Como el alcalde, en el Culler de Pau también hablan de "tranquilidad absoluta" y señalan que "se introducirán las modificaciones precisas porque son cuestiones menores". En este sentido "estamos hablando de apenas cuarenta centímetros de cristalera, por eso no vamos a dar más publicidad a este señor que se dedica a denunciarnos sistemáticamente y carece de toda credibilidad en O Grove".

En el restaurante concluyen que "a pesar de esta persecución vamos a seguir adelante con más ilusión y más ganas que nunca, porque tenemos un proyecto muy importante en marcha y vamos a seguir desarrollándolo en el futuro".