MANUEL MÉNDEZ | O GROVE
Decenas de familias arousanas acudieron durante el fin de semana a la "Aldea Grobit", habilitada por el Concello de O Grove en la isla de A Toxa. Las casas de piedra semienterradas y el parque infantil con elementos de juego elaborados en madera que ocupan la plaza central parecen resultar del agrado de vecinos y visitantes, a juzgar por el lleno registrado en algunos momentos, especialmente ayer, y a tenor también de los comentarios de padres e hijos.
Impulsada por la concejalía de Medio Ambiente, a modo de estímulo con el que incentivar el contacto de los grovenses con su isla, y también para convencer a las nuevas generaciones de lo mucho que puede depararles el Monte Central, esta "Aldea de los Grobits" va camino de colocarse en un lugar destacado entre los principales atractivos turísticos de la localidad, como en su día sucedió con el paseo de Pedras Negras-Con Negro o como ocurre de un tiempo a esta parte con Punta Moreiras y su Museo de la Salazón.
La "Aldea Grobit" tiene además el valor añadido de ubicarse en la isla estandarte del turismo en Galicia y situarse en las inmediaciones del parque canino, de los burros fariñeiros y de la red de senderos que serpentea a lo largo y ancho de los 210.000 metros cuadrados de monte público que conforman el Parque Forestal.
