Las historias de terror producen morbo y curiosidad, lo mismo que todos esos lugares que esconden un pasado tormentoso en su interior. España es un país plagado de pueblos abandonados y sucesos escalofriantes y son muchos los curiosos que en cada Halloween se acercan a este tipo de sitios en busca de algo de adrenalina y con suerte, sucesos paranormales. Toda una afición que en ciertos momentos ha llevado a las autoridades a tener que cerrar algunos pueblos por la afluencia de amantes del misterio.

Así, te presentamos los pueblos con las historias más siniestras de España:

Belchite (Zaragoza)

Son muchos los parapsicológos y televisiones que se han acercado a este pueblo zaragozano en busca de psicofonías y apariciones extrañas. Belchite, ahora Belchite El Viejo, es un pueblo en ruinas en el que se celebró la batalla homónima durante la Guerra Civil. Allí, sucumbieron hasta 6.000 personas, y fue el dictador Francisco Franco quien decidió que se quedaría así, pasando el pueblo a unos kilómetros más allá, como muestra viva de lo que provoca la guerra.

Según muchos expertos en temas paranomales, aun sigue habiendo vida en Belchite, pero llegada desde el más allá. Voces y apariciones han supuesto que sea una de las localidades más visitadas por los curiosos del miedo y el terror, seducidos por las leyendas que giran en torno al municipio.

Desde 2007, el perímetro de las ruinas está vallado y solo se admiten visitas guiadas. Un paseo por el pueblo viejo ya es una experiencia escalofriante, pero si se tiene ganas de más, los viernes y sábados la oficina de turismo ofrece visitas nocturnas centradas en los misterios y leyendas oscuras.

La Mussara (Tarragona)

Es otro de esos lugares que esconden el misterio en su interior. La Mussara es famoso por sus desapariciones, hasta el punto de que hay insluco dichos populares en torno al tema. Y es que, la expresión 'bajar de la mussara' se utiliza para hacer referencia a alguien que no se entera de nada, como si hubiera llegado de otro mundo. Y por aquí va la cosa con este lugar tarraconense. Son muchos los que dicen que dentro de sus ruinas se encuentra un portal temporal.

Lo cierto es que ni siquiera se conoce con exactitud el motivo por el que este pueblo quedó abandonado. Algunos inciden en la aparición de la filoxera, una enfermedad que ataca a la raíz de las plantas, y que hizo que los habitantes del lugar se largaran por no poder cosechar. O igual viajaron en el tiempo...

Según los vecinos, la historia más famosa del lugar es la de un setero que acudió con otros tres amigos a hacer una ruta buscando los hongos de temporada. Sus amigos se dieron cuenta de pronto de que él ya no estaba y cuando fueron a buscarle solo encontraron su cesta con un níscalo. Batidas de policías no sirvieron para saber más de lo que había ocurrido. Dicen que una piedra concreta de las ruinas es la que se lleva a la gente. Aunque también hablan de psicofonías, apariciones extrañas e incluso ovnis.

Ochate (Burgos)

Como su predecesor, Ochate no se queda corto en cuanto a historias sobre fantasmas y ovnis. Fue en los 80 cuando saltó a la palestra cuando un vecino de la zona publicó una foto de un supuesto platillo volante en la revista 'Mundo desconocido', y desde entonces, esta localidad burgalesa del condado de Treviño cuenta con miles de fans por toda España que no han dudado en acercarse a vivir experiencias paranormales. Normal que hace algunos años, como Belchite, se cerrar al público para evitar cierto tipo de prácticas y el vandalismo de los cientos de personas que se acercan cada año.

Así, el pueblo, totalmente derruido con tan solo un campanario en pie, se ganó la fama de maldito porque fue asolado por tres plagas seguidas en el siglo XIX, llevándose la vida de prácticamente todos sus habitantes. Algo que ha llevado hasta allí a muchos curiosos que aseguran que, sobre todo, se pueden escuchar psicofonías de personas diciendo a la gente que se vayan o que cierren las puertas. Inquietante.

Preventorio de Aguas de Busot (Alicante)

Este complejo arquitectónico construído durante el siglo XIX ha provocado el terror de muchos de los curiosos visitantes que se han acercado hasta Alicante. La oscura leyenda de este edificio que fue concebido como hotel y balneario se levanta después de la Guerra Civil, ya que durante este tiempo fue usado com hospicio para acoger a enfermos de tuberculosis.

Los amantes del misterio comenzaron a recorrer su destartalado interior en pos de la dama de blanco, una aparición en forma de luz blanca que se dice que deambula por el preventorio. También se han captado imágenes de monjes, lo que resulta más inquietante puesto que no hay constancia de que en su historia albergara religiosos.