Una manifestación exige en Pontevedra el final de la “depredación energética”

La marcha se celebró en la ciudad convocada por la plataforma Contra Vento e Maré y con el apoyo de un centenar de colectivos de Galicia, que exigieron transparencia y justicia

En la marcha participaron varios colectivos del centenar que apoyan la causa a nivel gallego.

En la marcha participaron varios colectivos del centenar que apoyan la causa a nivel gallego. / RAFA VAZQUEZ

Pontevedra fue el lugar elegido este domingo para la quinta manifestación a nivel gallego de la plataforma Contra Vento e Maré, que convocó a la ciudadanía, con el apoyo de numerosos colectivos de toda la comunidad autónoma, para expresar en la calle su oposición al actual modelo energético. Se solicitó “urgentemente” un modelo energético “transparente, justo y descentralizado, en manos cien por cien públicas y que cuente con la participación de los vecinos, enfocado en las necesidades locales”.

Entre las asociaciones presentes exhibieron sus propias pancartas Ecoloxistas en Acción Rías Baixas, Amil sen Eólicos, Encontro Burla Verde, Colectivo do Vento, Aldeas Libres de Macroeólicos, Vento Mareiro Ferrolterra, Ecoloxistas Galicia Atlántica e Verde, SOS Suido Seixo e Plataforma así Eólicos non, entre muchas otras que también acudieron a la cita social, a la que se unieron cientos de pontevedreses.

María Campos, de la Asociación Alarma na Terra de Montes, que forma parte de la plataforma Contra Vento e Maré, explica que la convocatoria contó con el apoyo de cien colectivos gallegos. “Es la primera vez que llega a Pontevedra esta manifestación, que es la quinta de esta campaña de ciudades y rural unidos contra la depredación energética. Estamos aquí para hacer partícipes a los ciudadanos del expolio que está sucediendo principalmente en el rural”, informa. Antes de llegar a la Boa Vila, la marcha ya estuvo en A Coruña, Vigo, Lugo y Ferrol.

Una manifestación exige en Pontevedra el final de la “depredación energética”

Varios niños sujetan "eólicos" de cartón ante la iglesia de A Peregrina. / RAFA VÁZQUEZ

“Y nos manifestamos contra la depredación energética, el destrozo de nuestro patrimonio natural y arqueológico llevado a cabo por los polígonos industriales eólicos, por las minas y ahora, de reciente actualidad, por la macrocelulsosa de Altri”, resume.

Campos lamentó que la ciudadanía “no cuenta con información real de lo que está sucediendo”. “Yo no tenía ni idea de todo esto hasta que me encontré un polígono industrial eólico sobre mi aldea. Cuando me enteré de esto supe que no era uno, sino cinco. No tenemos información veraz”, manifestó.

Es consciente de que es la lucha de David contra Goliat, pero recuerda que en el caso de los eólicos “la mayoría de los proyectos autorizados a día de hoy están en los tribunales y vamos a respetar sus decisiones, sean cuales sean, pero creemos que muchos de esos proyectos van a ser anulados”.

“Queremos paralizar todo lo que esté en marcha porque no tenemos garantías de que esté hecho de una forma rigurosa”, añadió.

En este sentido, recuerda que la flora y la fauna se ven seriamente afectadas por este tipo de iniciativas: “Basta con ver la Serra do Candán, que es Rede Natura a día de hoy y donde no hay un solo animal, no queda nada. También los manantiales y la salud de las personas: sombras, campos electromagnéticos... Por no hablar del patrimonio arqueológico. Hay que hacer las cosas bien hechas, con rigor Es una cuestión de la dignidad de la gente como la que estamos hoy aquí”, concluyó.

La manifestación momentos antes de partir desde A Peregrina.

La manifestación momentos antes de partir desde A Peregrina. / Rafa Vázquez

Preocupación por la generaciones venideras

En el manifiesto que se leyó en la manifestación que partió desde la Praza da Peregrina de Pontevedra, se recordó que “la mal llamada transición ecológica” no es capaz de resolver problemas medioambientales derivados de una economía “basada en el crecimiento irracional, que fomenta el consumo desmedido y que se sostiene por el expolio de materias primas, la sustracción del territorio y el robo de un futuro digno a generaciones venideras”.

“Se están llevando a cabo proyectos eólicos, mineros y papeleros que son masivos, sobredimensionados, ineficaces y sin planificación alguna, bajo un paradigma privatizador y centralizado”, afirmaron los manifestantes, que recordaron que la biodiversidad de Galicia “es la más rica y singular de toda Europa occidental”. Por todo ello, pidieron un modelo energético enfocado en una economía local basada en el cuidado de las personas y los ecosistemas.