Los Festivales de Música de Verano han vuelto para quedarse. Al menos hasta el 17 de septiembre. De lunes a jueves en La 2. ¿Dónde si no? ¿Pero a qué horas? Su ubicación tiene delito. Durante la primera semana hemos podido disfrutar de Clajazz, Continente Jazz Madrid que se celebró recientemente en los Teatros del Canal.

Al ver el horario de emisión he sentido vergüenza ajena. Y propia. Con decir que la sesión del bandoneón de Claudi o Constantini y su tributo a Astor Piazzola comenzó bien pasadas las tres de la madrugada y acabó cerca de las cinco, está todo di cho. Hasta dónde llegará el asunto, que a hasta esas horas no llegan las mediciones de las audiencias. Pero teniendo en cuenta que el espacio telonero, la enésima reposición de la serie

Los jinetes del alba fue vista por apenas 23.000 almas, ya podemos darnos una idea de cuántos se mantuvieron en pie ante el recital de Claudio. Pese a ser, en puridad, uno de los recitales más bellos de cuantos se pueden gozar sobre un escenario Las emisiones de los Festivales de Verano continuarán, en el mismo horario desquiciado, recorriendo Cazorla, Vitoria, San Sebastián y San Javier. Así es que TVE está tratando por igual las melodías de la tan cacareada «rueda» de la SGAE, que estas actuaciones de primer nivel.

O por lo menos, las ha ubicado en la misma franja horaria. Como si fueran lo mismo. Cuando te quejas a un programador sobre el perverso horario de emisión enseguida te responde que el cuándo es lo de menos. Que lo importante es que se emita. Porque si se emite, va a la web. Y si va a la web, uno lo ve cuando le apetece. No estoy de acuerdo con ese planteamiento. Nunca lo he estado y en 2017 sigue sin convencerme.