Mal rayo te parta. Literal. Le pasó a un reportero de la televisión china Dalian TV en el momento en que informaba del tiempo. Estaba en exteriores hablando del viento, el frío, la lluvia y la tormenta que cubría la ciudad. Y de repente, como si se lo arrebataran de las manos, el paraguas con el que se cubría el reportero voló tocado por un rayo. No le pasó nada ni a él ni al cámara, pero el canguelo hizo que el joven saliera pitando.

Aquí, cuando el martes informaba en directo Isabel Alonso para el informativo del mediodía de Telecinco sobre el primer pleno tras su dimisión en el Ayuntamiento de Madrid sin Esperanza Aguirre, portavoz municipal del PP, la periodista empezó a notar molestias en la garganta y notó cómo su voz tenía dificultades para hablar. Desde el estudio, la presentadora le preguntó cómo había sido la reacción de los demás partidos sin Aguirre.

La reportera respondió tosiendo, carraspeando ya, pero pudo decir que «el Partido Popular la ha echado de menos y el resto de grupos ha celebrado esta ausencia -tose, se toca la garganta-, ha celebrado esta ausencia, perdón... -y salió fuera de campo dejando el plano vacío con un fondo de la fachada del ayuntamiento-.

No fue un rayo. Seguro que fue la mano de Espe. Y sin salir de Telecinco, donde todo vale y se aprovecha para estiércol, cayeron rayos y truenos en la última visita de Mercedes Milá a 'Sálvame' para hablar -échense a reír- de su programa de libros. Mila Ximénez la llamó chunga, infeliz, fracasada, y que si quiere aplausos que se haga un plató y que alquile figurantes que le aplaudan. Con éstas, si estás cerca, un rayo no te caerá, pero la mierda seguro que te salpica.