Antonio Díaz, El Mago Pop, apasionado del ilusionismo desde que a los 4 años le sacaron una moneda de la oreja y ganador del Concurso Nacional de Magia, ha conseguido dejar "flipado" con sus trucos a uno de sus héroes de infancia, Nick Mason, batería del grupo británico Pink Floyd.

La escena se verá este viernes en el especial "El Mago Pop", con el que el canal Discovery Max pone colofón a "El día de la magia", que incluye el estreno de la nueva temporada de "Dynamo" (22,30 horas), el famoso ilusionista británico, y la visita de un grupo de magos a varios hospitales infantiles de Madrid, Barcelona y Sevilla.

"Sin duda, trabajar con los niños es lo más especial para un mago, porque para ellos la magia tiene un significado distinto, no la ven con desconfianza, y es muy bonito ver su ilusión, sobre todo si están en el hospital y se olvidan un poco de eso", explica Díaz, ganador del Concurso Nacional de Magia, en una entrevista con Efe.

Mago Pop también ha cumplido una ilusión de niño al conocer a Nick Mason, el histórico batería del grupo británico Pink Floyd, a quien dejó "flipado" con un truco de magia "de cerca".

"Aunque es muy británico, muy poco expresivo, hizo una mueca tras el número que para mí fue muy significativa y supuso un momento especial, porque me crie con su música y él concede poquísimas entrevistas", explica el mago, quien llegó hasta el siguiendo la teoría de los "seis grados de separación" que conecta a todo el mundo.

La cadena mágica se inició con Santi Balmes, líder del grupo Love of Lesbian y amigo del mago; el científico y divulgador Eduardo Punset; el actor Alejo Sauras; la cantante Ruth Lorenzo; y el cocinero Ferran Adrià.

Estos números son los que han resultado más complicados para Mago Pop por su "inmediatez", ya que "tiene el riesgo de hacer el juego a la primera con la cámara delante, por cuestiones de tiempo de esta serie de personajes".

Además, los trucos "de cerca" tienen "más credibilidad" y sirven como "aval" para "las grandes ilusiones", un género que está incorporando a sus espectáculos teatrales, como "La gran ilusión", que en breve estrenará en el Teatro Romea de Barcelona.

"Los juegos con los que más flipamos son los más sencillos, por ejemplo los de cartas", asegura este profesional, que de niño comenzó por practicar con un libro de Juan Tamariz, "un sabio de la magia", y después ha recorrido el mundo para completar una formación "autodidacta" con otros grandes magos del mundo, como el argentino René Lavand, especialista en cartomagia pese a que le falta una mano.

Confiesa que al ver en televisión los números de magia espectaculares que hace por ejemplo "Dynamo", el público pueda "pensar que está editado, pero no es así, si fuera de esa forma se podría poner a un actor, no a un mago".

De su experiencia del especial de una hora que estrena Discovery Max, el Mago Pop destaca lo mucho que le ha divertido su trabajo con la gente de la calle: "Me he encontrado con reacciones de todo tipo, del que flipa y se va corriendo, al que le da un ataque de risa o el que ni se inmuta y se queda con la boca abierta".

Confía en que esta racha de la magia en televisión tenga continuidad, porque lo normal es "que es ponga de moda y luego desaparezca", concluye.