Bea, la peluquera 'choni' de Picassent, ha terminado por conquistar los corazones de la audiencia y con ellos el maletín de 300.000 euros de 'Gran Hermano 17'. Ella, además, se lleva el amor de Rodrigo, el otro gran favorito para alzarse con el premio. La valenciana se impuso en la final a Meritxell con casi el 60% de los votos emitidos por los espectadores

Después de haber sido expulsada y salvada de la casa, de haber protagonizado una encendida defensa de la 'Geperudeta' y de haber defendido su 'chonismo' delante de toda España, esta valenciana que la semana pasada cumplía 20 años ha terminado por alzarse como ganadora de la edición 17 del reality más famoso de la televisión.

'Bea GH 17' llevaba semanas perfilándose como una de las favoritas para ganar la final de Gran Hermano junto al que se ha convertido en su pareja dentro de la casa, Rodrigo. La joven peluquera se ha ganado la simpatía de una audiencia que la ha salvado en numerosas ocasiones y ha castigado a todos los que se han enfrentado a ella en las últimas semanas en Guadalix de la Sierra hasta darle la victoria.

Polémica y provocadora

Odiada al principio por gran parte de la casa y del público acabó autonominándose para comprobar si tenía el favor del público. La audiencia castigó su osadía con la expulsión, pero una "vida extra" en manos de otra concursante le permitió volver a la casa. Su carácter extrovertido y su elevado tono de voz y carcajada la convirtieron desde un principio en foco de atención de las cámaras que vigilan cada movimiento en la casa de Guadalix de la Sierra. Su pelo rosa fosforito contribuyó a que todo el mundo conociera a Bea, la peluquera choni de Valencia.

Sale de la casa más tranquila, habiendo experimentado uno de los cambios de carácter más notables que se recuerdan. Y todo es gracias a Rodrigo, su nuevo novio y la pareja más sólida de esta edición. Se trata de un joven madrileño, tranquilo y callado al que otros concursantes han acusado de haber ido a Gran Hermano "a tomar el sol". El caso es que como sus respectivas madres afirman todas las semanas en plató, Rodrigo habla más desde que está en la casa y Bea grita menos. Una evolución digna de los primeros "experimentos sociológicos" de las primeras ediciones de Mercedes Milá y que la audiencia ha sabido valorar.

El top-less má sonado

Hace quince días su nombre circuló más que nunca en redes sociales después de que su madre, quien gestiona su cuenta en la red social de Instagram, colgara una provocativa fotografía de su hija haciendo top-less. La foto no tardó en hacerse viral y conseguir más de 10.000 me gusta, recabando el apoyo incondicional de todos los seguidores y fans que ha recogido en estos tres meses.

La joven de Picassent ya se convirtió en viral al principio del concurso cuando en medio de la casa de Guadalix de la Sierra hizo una encendida defensa de la 'Geperudeta' en Gran Hermano. Lo hizo cuando otro concursante mostró su absoluto desconocimiento sobre la Mare de Déu dels Desemparats. La concursante valenciana no dudó en defender con ardor a la "Geperudeta" ante su compañero.