Comienza la cuenta atrás. En pocos días la "frontera" entre A Estrada y Teo en el coto salmonero de Couso abrirá sus puertas. El mítico puente colgante de O Xirimbao se liberará de las rejas y candados que impiden cruzar una pasarela otrora abierta al público en general y convertida, por su particularidad y las hermosas panorámicas que ofrece, en un reclamo turístico para quienes visitan esta zona, desde una u otra ribera del caudaloso Ulla.

La previsión es que el próximo 1 de mayo, coincidiendo con la apertura de este coto a la temporada de pesca de salmón, el paso quede abierto en las jornadas y horarios hábiles para la pesca. De este modo, según había adelantado la Consellería de Medio Ambiente, la pasarela colgante se abrirá desde el 1 de mayo y volverá a cerrarse al público -un cartel colocado en su acceso la identifica como paso de pescadores- el 30 de septiembre. Durante todo este tiempo el puente colgante estará abierto todos los días menos los lunes y jueves y su horario es el mismo que el hábil para la práctica de la pesca, esto es, una hora antes del amanecer y hasta una hora después de la puesta del sol.

Por tanto, quienes quieran disfrutar de este particular paseo sobre las aguas del Ulla han de tomar buena nota y aprovechar la ocasión, ya que, especialmente cuando la climatología mejora, son muchos los visitantes del área recreativa próxima a este puente que se quedan con las ganas de cruzarlo.

En el año 2009 la Xunta decidió cerrar al público este paso aludiendo a motivos de seguridad. Cabe recordar que cuando esta estructura, deteriorada por el paso de los años, fue reformada se optó por realizar un acceso a la pasarela apropiada para facilitar también su utilización por parte de usuarios en silla de ruedas. Sin embargo, estos positivos cambios acabaron siendo aprovechados para un mal uso del puente por parte de conductores de motos y quads. Su imprudencia obligó a tomar estas restricciones y acabaron pagando justos por pecadores. El puente se abrió en 2007, tras una dilatada obra, para disfrute tanto de los pescadores como de todos los interesados en vivir esta experiencia. Se invirtieron en la actuación alrededor de 71.000 euros.