Los maravedís volverán a convertirse en moneda de curso legal en Ribadavia, dejando de lado al euro, durante los próximos viernes y sábado. Los jubones, capas y sayos volverán a ser la última moda en sus calles y los carruajes, el transporte de elección entre sus habitantes.

La Festa da Istoria cumplirá entonces 29 ediciones de recreación histórica, con una actividad muy especial como novedad. El castillo de los Sarmiento, en el centro de la villa, cobrará vida de la mano de un campamento. "Una treintena de actores de la compañía de teatro Viv'Arte y los grupos Guildas Áureas y Bordões das Beiras van a instalarse en una zona que habilitaremos dentro de la fortaleza, para representar durante las dos jornadas de fiesta, mañana y tarde, como era la vida en el medievo", explicaba Yolanda Gómez, vicepresidenta de la Coordinadora de la Festa da Istoria de Ribadavia.

Con esta iniciativa buscan "darle un poco más de animación al castillo", en el que hasta ahora solo había una serie de actividades puntuales, como el ajedrez viviente. "Queremos que esté activo durante todo el día", indicaba la portavoz de la organización.

Así, los visitantes podrán comprobar en directo, en una lección de historia en vivo, cómo era la existencia de nuestros antepasados en el siglo XV. Cualquiera podrá acercarse hasta este campamento durante la jornada del viernes, pero el sábado, será requisito indispensable para entrar, acudir vestido de época.

La organización ha presentado ya un programa que incluye más de cincuenta actividades que alrededor de 2.000 voluntarios hacen posible. Aunque Yolanda Gómez reconocía que "es difícil calcular toda la gente que está involucrada en la Festa, además de que algunos voluntarios son muy polifacéticos y ayudan en varios frentes".

Este año habrá un grupo de invitadas de honor entre estos dos millares de personas. "La Festa da Istoria está hermanada con el Passo Honroso de Hospital de Órbigo en León, y las chicas que danzan en esta celebración vendrán a Ribadavia, para participar en la actuación de nuestras Donas sen Cabaleiros", anunciaba Yolanda Gómez.

La villa vivirá así un "flashback" que consigue financiarse gracias, en buena parte, al uso del maravedí, pues de cada cambio, un 10% se destina a los costes de organización. Una característica que además hace a esta fiesta única en España, pues ninguna otra dentro del estado tiene su propia moneda oficial.