O Grove no es ajeno a la imparable escalada de contagios que afecta a los diferentes municipios arousanos, actualmente con trescientos positivos más que hace un mes.
El alcalde, José Cacabelos, confirmaba esta mañana que los datos que maneja el Sergas hablan de 330 casos activos a día de ayer, es decir, 33 más que en el lunes.
Se ha pulverizado, en consecuencia, la simbólica barrera de los trescientos, al igual que se rebasó hace mucho aquel triste récord absoluto de entre 70 y 80 casos, que en olas anteriores de contagios situaron a O Grove en la peor situación de Galicia e incluso hicieron que tuviera que aplicar su propio confinamiento perimetral.
Hace mucho, hay que insistir, que se dejaron atrás aquellos registros que parecían escandalosos y ahora se antojan casi anecdóticos, teniendo en cuenta que O Grove parece haber enfilado una escalada interminable.
Baste como ejemplo decir que en la primera quincena de diciembre este municipio se movió siempre entre los 40 y 50 casos activos, descendiendo hasta los 36 positivos el día 14.
Pero desde entonces no dejaron de subir, alcanzando los 45 positivos el día 20 de diciembre, para llegar a aquel simbólico récord de 77 marcado el 27 (igualando la cifra histórica del 19 de julio) y contabilizar 122 casos el 30 de diciembre.
Dicho de otro modo, que en lo que va de año se sumaron alrededor de doscientos nuevos positivos en la península meca, donde el número de habitantes no llega a los 10.600.