“Se nos ha olvidado que la plaza fue creada para dar un servicio a la gente"

Raquel Albaladejo Bermejo es, desde enero, la presidenta de la asociación de vendedores de la plaza de abastos de Vilagarcía de Arousa.

Al asumir el cargo se comprometió a trabajar, junto a su equipo directivo, para reverdecer los viejos laureles de este otrora importante mercado municipal, y desde hace años sumido en un preocupante declive.

Llega ofreciendo diálogo y apostando por unir fuerzas para sacar partido al “enorme potencial” de las instalaciones, pero no lo tiene fácil.

–Hace días declaraba usted en FARO que “entre todos, y de la mano del Concello, podemos hacer de la plaza de Vilagarcía una de las grandes de Galicia, para lo cual debemos cerrar filas y comprometernos todos a trabajar para salvarla”. Y eso la llevaba a decir que es imprescindible abrir los puestos a diario, lo cual desagrada a muchos...

–Si de verdad queremos sacar adelante la plaza de abastos hay que ofrecer el mejor servicio posible y convertirla en un punto de venta capaz de atraer clientes. Para ello debemos ofrecer tanto la habitual calidad de nuestros productos como variedad, y eso supone ofrecer al cliente todas las opciones posibles cuando llega al mercado. Si viene alguien a comprar tenemos que darle la oportunidad de llenar la cesta con todo tipo de productos. Es contraproducente para todos que venga y vea los puestos vacíos, ya que se marchará al súper u otros negocios y tarde o temprano ya no volverá.

¿Es el derecho a "no trabajar” un lastre para la plaza?

–Pero hay vendedores que se niegan a abrir sus puestos todos los días, alegando que no le resulta rentable.

–Y menos rentable que será si la plaza de abastos desaparece.

–¿Y qué va a hacer?

–Diálogo, diálogo y diálogo. Tenemos que hacer ver a la gente que está en juego el futuro de la plaza y entre todos debemos conseguir un espacio atractivo, capas de atraer gente de toda Vilagarcía y de toda la comarca, como ocurría hace tiempo.

–Pero sus detractores dicen que antes no tenían que trabajar todos los días y que la plaza funcionaba mejor.

–Antes la plaza funcionaba prácticamente sola, pero ahora todo es diferente, hay mucha más competencia y los hábitos de consumo han cambiado. No podemos seguir estancados en el pasado, sino que hay que mirar al futuro y adaptarse para competir.

–¿Cómo espera conseguirlo”

–Convenciendo a la gente de que la plaza no es nuestra, sino de los ciudadanos.

La plaza de abastos, ¿ante su última oportunidad?

–¿Qué quiere decir?

–Pues que parece que se nos ha olvidado que la plaza de abastos de Vilagarcía fue creada para la gente, no para nosotros.

–Cuando dice “nosotros” habla de los vendedores.

–Claro. Es que parece que cada uno quiere ir por su lado y pensar en sí mismo. Uno no puede estar pensando en si le interesa más abrir un día u otro, sino que debe pensar en Vilagarcía y los habitantes de Vilagarcía como de toda la comarca, porque esto se creó para dar un servicio y no lo estamos dando. Eso es lo que debemos tener en cuenta, asumiendo que nos debemos a los clientes.

–Que es, por otra parte, lo que establece la ordenanza o reglamento interno cuando obliga a los concesionarios a abrir los puestos a diario...

–Efectivamente. Tenemos que dejar de agarrarnos a los intereses personales de cada uno y pensar que esto está hecho para la gente. Debemos entender de una vez por todas que lo que demandan los clientes es poder disponer de una plaza activa y viva. Solo así saldremos ganando todos.

–Se la ve volcada y muy convencida... ¿Cree que logrará sacar esto adelante?

–Como ya expliqué hace días en FARO DE VIGO, se ha multiplicado el número de miembros de la asociación, y eso significa que la gente es consciente de que hay que empezar a moverse. Y también dije que en el Concello de Vilagarcía hay ganas de colaborar y de ayudarnos a reflotar la plaza. Por eso insisto tanto en apelar al diálogo y a la unión de fuerzas, ya que solo así podremos encarrilar nuestros proyectos.

Entre ellos el de disponer de una zona o franja horarias de estacionamiento para vendedores y clientes, ya que es algo que nos está demandando mucho la gente. Pero claro, también para lograr esto es necesario que los vendedores ofrezcamos un buen servicio diario, pues no podemos pretender tener un parking reservado si los puestos de la plaza están cerrados.

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