El audiovisual gallego tuvo premio en la gala de los Goya que se celebró ayer en Madrid.Triunfó la animación gallega por partida doble, al lograr el director Alberto Vázquez el cabezón en las dos categorías a las que estaba nominado. Anabel Alonso, Kiti Manver y Miki Esparbé anunciaban que Psiconautas, los niños olvidados recibía el Goya a la Mejor Película de Animación. La cinta que Vázquez codirige con el vasco Pedro Rivero superó a Ozzy, de Alberto Rodríguez y Teresa eta Galtzagorri, de la vasca Agurtzane Intxaurraga. Minutos después el gallego volvía a subir al escenario para recoger el premio al Mejor Cortometraje de Animación por Decorado, que se imponía a Darrel, de Alan Carabantes y Marc Briones; y Made in Spain, de Coke Riobóo y Uka de Valle Comba.

Además, Ana Belén y Emma Suárez fueron las reinas de la noche. En una ceremonia con premios bastante repartidos, con la Academia reconociendo el paso de Raúl Arévalo a la dirección y "Un monstruo viene a verme" arrasando en las categorías técnicas, logrando hasta nueve galardones (incluido el de Mejor Director para J. A. Bayona), nadie brilló tanto como Emma Suárez, que hizo un doblete histórico alzándose con los premios a la Mejor Actriz principal y de reparto, y como Ana Belén, que aprovechó la entrega del "Goya" de Honor para reclamar un mayor reconocimiento no personal, sino colectivo. A todas las mujeres.

"Se me escapa la razón por la que sigue habiendo tan pocas mujeres en el cine", afirmó la actriz, cuyo discurso hizo ponerse en pie al auditorio. Su marido, Víctor Manuel, también lograría una ovación, ya al final de la gala, cuando se interpretó su canción "Porque somos como somos", encargada por la Academia y dedicada al cine.

Como se esperaba, Raúl Arévalo fue uno de los nombres de la noche. El cineasta, que ya había logrado un primer Goya como Mejor actor de reparto por "Gordos", cumplió los pronósticos y se convirtió en el primer ganador de la noche al alzarse con el premio (cantado) a Mejor director novel por "Tarde para la ira". Fue el primer premio para un filme que se alzaría con otros tres galardones, todos de calado, incluido el de Mejor Película.

Pocas dedicatorias fueron tan emotivas, no obstante, como la de Carlos Santos, ganador del premio al Mejor actor revelación por su interpretación de Luis Roldán en "El hombre de las mil caras", y que dedicó el galardón a su hermana Laura, enferma de cáncer, que no pudo acudir a la gala. "En el día mundial contra el cáncer, sobran las palabras", afirmó, emocionado, el intérprete.

Como no podía ser de otro modo, tanto en la ceremonia como en los instantes previos no faltó algún ramazalo reivindicativo. Dani Rovira lanzó un par de andanadas a la clase política en el monólogo inaugural. "Bienvenidos a todos los políticos presentes. Esta noche les vamos a dedicar el tiempo proporcional al que ustedes han dedicado a la cultura en sus discursos, campañas electorales y debates? ya está", afirmó primero el presentador, que acto seguido, y al referirse a la temática de "El hombre de las mil caras", que profundiza en la corrupción, dejó una memorable pregunta en el aire:"¿Teníais guión o tirabais de periódico?"

No fue Rovira el único que tiró a dar. Silvia Pérez Cruz cantó a los desahuciados al recoger su Goya a la Mejor canción original. Y Pedro Almodóvar, en los prolegómenos de la gala, afeó las recientes declaraciones del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, reconociendo que no había visto ninguna de las películas nominadas:"Una buena manera de conocer la realidad española es ir al cine", afirmó el director manchego.

Dani Rovira hizo suya la lucha para que las mujeres logren más papeles protagonistas cuando, sobre un buen par de tacones, recordó en la gala que, en 2016, un total de 78 hombres dirigieron películas en España, por solo 18 mujeres. Una tendencia que es necesario equilibrar en el cine español.