Brad Pitt y Angelina Jolie han estado en la boca de los medios desde que anunciaran su separación en septiembre de 2016. Cuando parecía que después de más de dos años de batalla legal la paz había llegado, el divorcio de los actores parece ser más agridulce de lo que parece.

Pese a que hace dos semanas Angelina y Brad llegaron a un acuerdo in extremis para tener la custodia compartida de sus seis hijos: Maddox, Pax, Zahara, Shiloh, Vivienne y Knox, después de la corta calma llega de nuevo la tormenta.

Según ha informado una fuente cercana a los actores al medio Us Weekly, Angelina comentó a su hijo Pax que su padre "nunca quiso adoptarlo". La actriz de 43 años explicó que una de las consecuencias de ello era que estaba "cabreado" porque Jolie había procedido a su adopción sin haberle consultado nada a su pareja.

El informante explicó que a Brad le preocupaba adoptar a un niño de tres años que no hablaba inglés al encontrarse a menos de un año para darle la bienvenida a su primera hija biológica, Shiloh, por lo que fue "un difícil momento para la pareja". La fuente reveló que este fue uno de los detonantes que casi provoca el fin de 'Brangelina', pero el actor tuvo paciencia y decidió continuar con su noviazgo.

A todo ello se suma que la poca relación que tiene el intérprete de Troya con alguno de sus hijos, en concreto con el mayor, Maddox. Brad ha aceptado que probablemente nunca podrán dejar sus diferencias a un lado y "reparar su relación".

El testigo también ha añadido que el joven de 17 años siempre ha sido #TeamAngelina, agregando que era "el confidente más cercano" de la actriz durante el momento más duro de la separación de sus padres.

Shiloh, de los cuatro hermanos mayores, es el que parece que tiene más ganas por volver a tener un trato favorable con su padre al igual que Zahara. Mientras tanto, las mellizas Knox y Vivienne "han estado protegidas de muchos de los problemas", expresó el testigo.