El Colegio Rural Agrupado (CRA) Mestra Clara Torres de Tui tiene varias aulas en las diferentes parroquias del municipio. Una de ellas se sitúa en Pexegueiro, y tanto los vecinos como los propios trabajadores se temen lo peor: que tenga que cerrar tras casi veinte años de actividad por falta de niños. Ofrece educación para pequeños de entre tres y seis años y ahora mismo hay unos ocho matriculados. El problema es que varios de ellos el curso que viene pasan ya a educación primaria, y con los que se quedan no llegan al ratio mínimo marcado por las autoridades educativas (unos cinco niños para escuelas de este tipo) para poder comenzar el curso. Aunque el proceso de matriculación comienza en marzo, la preocupación nace porque los niños que históricamente han acudido a este centro son naturales de la propia parroquia de Pexegueiro, y ahora, con los datos que manejan desde la dirección del centro educativo, ya no hay pequeños en edad en esa parroquia para anotarse a la escuela infantil.
Por eso, para evitar su cierre, especialmente los vecinos de Pexegueiro han lanzado una campaña para intentar captar alumnos de otras zonas de Tui al considerar que las ventajas de estudiar en una escuela infantil rural como esta son numerosas. La movilización es tal que incluso la comunidad de montes de Pexegueiro se ha ofrecido a pagar todos los gastos (material, etc) de los nuevos matriculados. Entre las principales ventajas que citan tanto los padres como la dirección del centro es que se trata de una escuela con un ratio muy bajo de niños, por lo que la atención es muy personalizada. Además, cuentan con proyectos tan interesantes como una huerta escolar, clases de robótica, una biblioteca solidaria y creativa, clases de iniciación al yoga, una radio escolar y clases de robótica. Y en un momento como el actual donde es preferible estar en espacios abiertos por la situación sanitaria, los pequeños están en constante contacto con la naturaleza y se respetan siempre las medidas de seguridad. Además, el centro es un elemento dinamizador clave del rural y mantenerse abierto sería clave para la parroquia de Pexegueiro.
Al frente del CRA Mestra Clara Torres de Tui está Rocío Varela, que sustituyó hace unos meses a Teresa Domínguez. Varela reconoce las dificultades que están encontrando para encontrar niños para el próximo curso y que el riesgo de cierre “es real” si no se llega al ratio mínimo marcado por la Xunta. Porque aunque los pocos alumnos para una atención personalizada son una de las señas de identidad de este tipo de aulas, tiene que haber un mínimo.
Premio a Mejor Escuela del Año
Desde el CRA Mestra Clara Torres se esperaba que el premio recibido el año pasado a Mejor Escuela del Año, galardón que entrega la Fundación Princesa de Girona “por ser un ejemplo de dinamización en entornos rurales a través de la participación e implicación de las familias y de los miembros de la comunidad de la que forman parte” y su “compromiso con la integración del valor de la solidaridad en sus actividades y su capacidad de transformación educativa”, supusiese un impulso para captar nuevo alumnado, pero de momento tampoco está funcionando como incentivo.
Toda la comunidad (vecinos, comuneros, personal docente...) se ha volcado para intentar captar a nuevos niños para el curso que viene. El CRA Mestra Clara Torres de Tui cuenta con aulas en las parroquias de Baldráns, Caldelas, Ribadelouro, Guillarei, Areas y Pexegueiro. Y esta última es la que está teniendo más dificultades para encontrar niños para el próximo curso.
