La crítica situación que vive la hostelería a raíz del coronavirus ha llevado a los empresarios del sector a buscar apoyo llamando a muchas puertas. El asociacionismo es una de ellas, y por ello surgió hace unos meses en la comarca de Redondela el colectivo “Rías Baixas”, que ya reúne a unos 80 negocios de hostelería de este municipio, de los vecinos de Soutomaior y Mos, además de otros puntos de la provincia.

El presidente de la asociación, José Manuel Barbosa, explica que “Rías Baixas” busca la defensa de los intereses del sector hostelero con un enfoque práctico. “No se trata de salir a la calle a hacer caceroladas o concentrarse delante de la sede de las administraciones, sino de proponer cuestiones concretas que ayuden a nuestros negocios”, dice.

En este sentido, la asociación empresarial firmó este martes un convenio con Abanca para conseguir, como colectivo, condiciones ventajosas en la concesión de préstamos o el uso de tarjetas de crédito. El acuerdo con la entidad bancaria permite a los socios obtener financiación con plazos e intereses preferentes.

“Rías Baixas” trabaja en otros frentes para paliar la situación que atraviesan los hosteleros de la zona. Denunciar la competencia desleal de los ‘furanchos’ es una de ellas. Otra iniciativa se refiere a las actuales condiciones del sector. Barbosa se dirigió por escrito a la Consellería de Turismo proponiendo flexibilidad en los horarios impuestos por las restricciones, de manera que “permitan repartir las doce horas que pueden abrir los negocios –ahora de 6 de la mañana a 6 de la tarde– según el tipo de establecimiento, pues no tienen la misma clientela una cafetería que un restaurante”, apunta, “siempre respetando aforos y todas las medidas sanitarias”.