Hacía tres meses que A Lomba no tenía público en sus gradas. La evolución del coronavirus lo había hecho imposible y en Vilagarcía se echaban de menos los domingos de fútbol.

El regreso al campo sirvió para que los espectadores pudiesen ver a un equipo entonado ante un rival que no le puso las cosas precisamente fácil, pero que, con los dos goles anotados por Pedro García y Kilian Villaverde, tiene prácticamente encarrilada la clasificación para la siguiente fase, una fase en la que peleará por el ascenso a la 2ª RFEF, esa categoría nueva con la que pretende remodelarse el fútbol modesto español.

La primera mitad fue de dominio netamente arlequinado, con un Rápido de Bouzas que cedió el dominio del juego para armarse desde la defensa y aguardar una pérdida de balón o una contra que les permitiese batir a Álex Cobo.

Las ocasiones más claras fueron locales, sobre todo en los primeros diez minutos, donde Róber y Pedro Beda, los dos hombres más en punta de los arlequinados, metieron en muchos problemas a la zaga aurinegra. Hasta en dos ocasiones centró el mediapunta y remató el delantero un tanto desviado. También Mon quiso tentar la suerte sobre el cuarto de hora, con un centro chut que atrapó Rui Santos.

La efervescencia local fue diluyéndose con el paso de los minutos y el Rápido de Bouzas consiguió igualar la lucha en el centro del campo, lo que le facilitó la vida a su portero, sobre todo cuando uno de sus defensas se cruzó en un disparo de Róber.

30

El Arosa se aprovecha de los errores de la UD Ourense A. G./N.P.

La primera ocasión visitante llegaría en el minuto 48, ya con la segunda mitad iniciada. Los de David de Dios presionaron de forma acertad ala salida del balón local y Juan Barbeito se hizo con un balón en la frontal que no cogió portería. Parecía que el Rápido de Bouzas quería asomar la cabeza y dar un paso más al frente, pero no fue así. El dominio del balón regresó al Arosa, que comenzó a rondar con cierto peligro la meta del equipo vigués.

Pedro García abrió la lata

Tras varios avisos, en el minuto 56 llegaría el primer gol de la tarde en una jugada en la que Pedro Beda puso un centro perfecto a media altura para que Pedro García enviase, de cabeza, el balón al fondo de las mallas. A pesar del tanto, ninguno de los dos equipos varió su plan de juego, con los arlequinados gozando de llegadas con cierto peligro al área de Rui Santos y con el Bouzas recurriendo al balón parado para acercarse a la de Álex Cobo.

De todas formas, la ocasión más clara volvería a caer del lado arlequinado. Javi Fontán consiguió robar un balón en zona de peligro, el balón llegó a Pedro Beda. El brasileño sorteó a Rui Santos y empujó el balón hacia la portería con toda A Lomba cantando el tanto, pero Arán consiguió llegar a tiempo para desviar el balón en la línea de gol.

David de Dios, viendo que se le escapaba el encuentro, optó por dar entrada a Viti y Canhoto, y el equipo vigués mejoró de forma notable, aunque sin efectividad, ya que, una y otra vez, se estrellaba con la solvente zaga local. Así las cosas, el Arosa aprovechó para cerrar el encuentro. Recién entrados en el terreno de juego, Julio rey conectó con Kilian Villaverde a través de un pase filtrado, y el delantero catalán soltó un zurdazo imparable para el meta visitante.

El segundo tanto dio tranquilidad a las locales y pese a que su rival trató de buscar su gol hasta el final, lo cierto es que no logró generar ocasiones hasta que ya en el minuto 94 la tuvo Viti en área pequeña y la desbarató Álex Cobo, que volvió a dejar su portería a cero por tercera jornada consecutiva.

“El plan de partido salió perfecto”


El técnico del Arosa, Rafa Sáez, se mostró muy satisfecho ayer del encuentro que disputaron sus pupilos ante un rival que venía en progresión como era el Rápido de Bouzas. Sáez destacó que “hemos hecho un buen trabajo, madurando el encuentro y moviéndonos con solvencia”. Sáez reconoce que “el plan de partido ha salido perfecto, concediendo muy poco en defensa; para nosotros el balance defensivo es muy importante, tenemos solidez en el juego colectivo y el Rápido apenas apareció en la última jugada de partido”. Con la clasificación prácticamente sellada, Sáez sigue manteniéndose cauto “hasta que sea matemática, y a partir de ahí, será cuando nos fijemos en los rivales que nos puedan tocar en la siguiente fase”.