Las Bravas do País ante un reto histórico

El Balonmán Cangas-Tapería Dos Chata tiene ante sí algo más que una fase de ascenso. Las jugadoras del conjunto senior tienen ante sí el reto de alcanzar una categoría a nivel nacional en una competición por equipos y dar un nuevo impulso al deporte femenino en O Morrazo. “Ascender a Primera Nacional sería algo histórico, no solo para el club y las deportistas sino también para el deporte en O Morrazo”, afirman desde la directiva del Cangas, que quiere que el pabellón de O Gatañal registre un ambiente similar al de los partidos de Asobal y que haga honor a su apelativo de “fervedoiro”. Entre el público estarán los integrantes del equipo de Asobal y la palista y medallista olímpica Teresa Portela, que no podrá estar, acaba de enviarles un video de apoyo y ánimo.

El club recuperó hace dos temporadas el equipo senior femenino, que arrancó su andadura en la Primera Autonómica y en este tiempo ya se ganó el nombre de guerra de As Bravas do País. En la primera campaña, después de ser líderes durante gran parte del año, tuvieron que conformarse con la segunda posición y quedaron eliminadas en la posterior Final a 4.

Este año el equipo, ahora entrenado por Daniel Malvido, volvió a exhibir una gran regularidad. Volvieron a quedar subcampeonas y en la Final a 4 disputada en Carballo vencieron al Calvo Xiria, con lo que se ganaron el derecho a jugar esta fase de ascenso a Primera Nacional con el Sinfín, Covadonga y Bera Bera. Las donostiarras a priori parten como favoritas ya que forman parte de la estructura de uno de los grandes del balonmano femenino español.

La del Cangas-Tapería Dos Chata es una apuesta por el futuro. El equipo es jovencísimo y la base está formada por una generación de jugadoras que hace unos años ya hicieron historia con un tercer puesto en el Campeonato de España infantil. “Todas tienen edades comprendidas entre los 16 y los 20 años. La única excepción es la capitana, Laura Barros [extremo izquierda], que tiene 23”, destacan desde la directiva y el cuerpo técnico.

En esta refundación del equipo senior femenino el club contó a su favor con el sentimiento de pertenencia y la identificación de dos de sus piezas claves: Laura Magdaleno [central] y Anastasija Doder [lateral derecha e hija del exjugador de Asobal Tihomir Doder]. “En su día las dos se fueron a la cantera del Porriño, que compite en la Liga Guerreras Iberdrola [la máxima categoría del balonmano femenino nacional] y Laura tuvo la oportunidad de debutar con el primer equipo. Cuando decidimos recuperar el equipo senior femenino las dos quisieron volver al Cangas”, destacan desde la directiva canguesa.

El objetivo del club no es el ascenso en sí mismo, sino consolidarse como un auténtico referente en el deporte del balonmano. Algo que pasa por atraer y fijar el talento femenino de la comarca y alrededores, replicando el modelo que se sigue con la modalidad masculina. “Queremos que las chicas tengan un espejo donde poder mirarse, que les atraiga este deporte y que sepan que aquí pueden tener la oportunidad de jugar y crecer”, insisten desde el Balonmán Cangas. Un camino que en su día ya hicieron Suso Soliño, Adrián Rosales, Adrián Menduíña, Moisés Simes o David Iglesias. Un recorrido que a algunos, como en el caso de David Iglesias, les llevó incluso a debutar con la selección española absoluta.

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