Galicia urge instalar cinco electrolineras al día hasta 2030 para cumplir la demanda

Galicia necesita construir una media diaria de 5,17 puntos de recarga para coches electrificados si quiere cumplir con el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), elaborado por el Ministerio para la Transición Ecológica. Una de las metas que se propone este proyecto es que haya cinco millones de vehículos eléctricos en España en 2030 (tres millones de turismos y más de dos millones de motocicletas, camiones ligeros y autobuses). Con este objetivo en mente, la patronal de concesionarios Faconauto y la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) elaboraron una hoja de ruta para calcular cómo debe ser la progresión de instalación de puntos de recarga, imprescindibles para abastecer el parque móvil deseado. ¿Conclusiones? Galicia debe tener 3.155 puntos a finales de 2023 y 16.426 para finales de ese 2030 que se fija como horizonte. Y las cifras actuales no invitan al optimismo: Galicia cuenta hoy con 501 puntos de recarga de acceso público, según datos de Anfac. En julio del año pasado, tenía 330.

La situación se replica en el resto de España. “Vamos a 2.000 por año; no se va a llegar, es totalmente inviable”, cuenta a FARO Raúl Morales, de Faconauto. En concreto, Galicia es la octava comunidad con más puntos de recarga. Porcentualmente, dispone del 3,51% de los de todo el Estado.

Vamos a 2.000 puntos por año en España. No se va a llegar al objetivo, es totalmente inviable

Pero la verdaderamente rezagada es España. Según datos de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA, por sus siglas en inglés), el país cuenta con un total de 7.407 puntos de recarga. Una cifra que, en la Unión Europea, solo superan a la baja Portugal, Irlanda, Luxemburgo, Malta, Finlandia, Grecia y los países del bloque del Este. Dicho de otra manera: aunque España tiene el 11,93% de la superficie y el 10,61% de la población de la Unión Europea, solo cuenta con el 3,3% de los puntos de recarga.

Los alumnos más aventajados aquí son Alemania (44.538 puntos de recarga), Francia (45.751) y, sobre todo, Países Bajos (66.665). Estos tres países concentran el 70% de las instalaciones de los veintisiete.

Mercado del vehículo electrificado: distribución de los puntos de carga

Tres países (Alemania, Francia y Países Bajos) concentran

el 70% de todos los puntos de recarga de la UE

32,2%

18,1%

1,8%

16,4%

2,7%

7,4%

1,1%

25%

10,7%

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sin datos

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0,5%

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1000

5.000

10.000

35.000

70.000

Fuente ACEA. 2021

Anabel Montouto

Mercado del vehículo electrificado:

distribución de los puntos de carga

Tres países (Alemania, Francia y Países Bajos) concentran

el 70% de todos los puntos de recarga de la UE

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5.000

10.000

35.000

70.000

Alemania 13,5%

Austria 9,5%

Bélgica 10,7%

Bulgaria Sin datos

Chipre 0,5%

Croacia 1,9%

Dinamarca 16,4%

Eslovaquia 1,9%

Eslovenia 3,1%

España 4,8%

Estonia 1,8%

Finlandia 18,1%

Francia 11,2%

Grecia 2,6%

Hungría 4.7%

Irlanda 7.4%

Italia 4.3%

Letonia 2.7%

Lituania 1.1%

Luxemburgo 11.4%

Malta Sin datos

Países Bajos 25%

Polonia 1.9%

Portugal 13.5%

Rep. Checa 2.5%

Rumania 2.2%

Suecia 32.2%

Fuente ACEA. 2021

Anabel Montouto

Mercado del vehículo electrificado: distribución de los puntos de carga

Tres países (Alemania, Francia y Países Bajos) concentran

el 70% de todos los puntos de recarga de la UE

32,2%

18,1%

1,8%

16,4%

2,7%

7,4%

1,1%

25%

10,7%

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11,4%

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2,5%

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11,2%

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35.000

70.000

Fuente ACEA. 2021

Anabel Montouto

Lo que hace falta para que España cumpla con los objetivos de Transición Ecológica es una inversión de 5.000 millones de euros, explica Morales, de la que, ahonda, deben hacerse cargo tanto el sector como las propias administraciones públicas. Pero el problema no es solo monetario: también es necesario que, desde el punto de vista administrativo, se facilite su instalación y que, además, los puntos que se dispongan tengan, “como mínimo, una potencia de 150 kW, que permite cargar un coche en unos 30 o 40 minutos; de lo contrario, se van a quedar obsoletos enseguida”, destaca Morales. Y este punto no es baladí porque el 87,02% de los puntos de Galicia tiene una potencia inferior a los 22kW, según el último “Barómetro de la electromovilidad” de Anfac, correspondiente al primer trimestre de 2022. Es decir, el tiempo de espera para cargar la batería en estas instalaciones está entre las tres y las 19 horas. Solo siete puntos tienen una potencia superior a los 250 kW, con lo que se pueden llenar las pilas en 10-15 minutos.

Las infraestructuras que necesita Galicia en materia de automoción eléctrica no vienen solo dadas por el Ministerio para la Transición Ecológica. El año pasado, Bruselas propuso eliminar la compraventa de coches y furgonetas de combustión (híbridos incluidos), salvo los de segunda mano, en 2035.

Se trata de una meta que no solo supone un reto organizativo, sino un ejercicio de malabares financieros para muchas familias. Lo explica Morales: “Ahora mismo una renta media no puede acceder a un vehículo eléctrico”, sensiblemente más caro que el de motor a combustión. Los datos lo avalan: de los 946 vehículos matriculados en mayo en Galicia, solo un 16,27% (154) eran eléctricos.

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