El coste de la factura energética se viene incrementando año a año para los consumidores de nuestro país, orientando a familias y empresas hacia el ahorro energético. A este interés se une la creciente preocupación por el cambio climático, que los estudios atribuyen al uso de combustibles fósiles, cuyo reemplazo por otras fuentes energéticas con un menor impacto ambiental es necesario y urgente para garantizar la calidad de vida en nuestras sociedades avanzadas sin poner en riesgo a las generaciones futuras. Como “descarbonización” se conoce a este tipo de iniciativas por las que se está apostando fuertemente en la Unión Europea, que se ha planteado reducir las emisiones de gases de efecto invernadero entre un 80% y un 95% con respecto a las de 1990 para el año 2050.
COITIVIGO es garante ante la Sociedad de la buena práctica de la profesión y de la promoción de nuestros colegiados, y apuesta fuertemente por la capacitación y la excelencia de nuestros profesionales en el campo, entre otros, de la eficiencia energética.
Además de impulsar las fuentes energéticas renovables para reemplazar a las convencionales, se han promovido también a todos los niveles múltiples iniciativas destinadas a reducir el consumo de energía en todos los ámbitos privados y públicos. En particular, la aprobación en el año 2006 del Código Técnico de la Edificación ha actualizado las exigencias en cuanto a la demanda energética de los edificios para adecuarlos a un contexto de fuerte dependencia energética de las fuentes fósiles, aunque en transición hacia soluciones más limpias, llegando a imponer en muchos casos la adopción de sistemas de energías renovables como requisito previo para la autorización de nuevas construcciones.
La sensibilización de la sociedad hacia el problema de la energía ha avivado también el interés por nuevos materiales y formas de construcción, como pueden ser las “casas pasivas”, edificaciones diseñadas para un consumo energético muy pequeño. Estas se han popularizado en nuestro país en los últimos años, y si no era frecuente encontrar profesionales familiarizados con este concepto, en la actualidad, hay abundante información sobre el tema, y un número importante de estudios de ingeniería y arquitectura incluyen este tipo de edificaciones en su cartera de servicios.
A la vez que en la edificación nueva, se observa una tendencia similar en la rehabilitación de edificios existentes, donde la adaptación de los espacios a las condiciones de habitabilidad actuales se ha acompañado de intervenciones constructivas orientadas a reducir la demanda energética de la edificación, tanto la térmica (calefacción, refrigeración, etc.) como la de iluminación. A esta reducción ha contribuido en gran medida la aparición en el mercado de equipos de alta eficiencia energética a unos costes cada vez más asequibles, pero que requieren de un estudio detallado y preciso, así como de una cuidadosa instalación y un mantenimiento adecuado, para poder aprovechar plenamente su potencial de ahorro durante toda su vida útil.
Un estudio integral del uso de las diferentes fuentes de energía en el edificio permitirá determinar las actuaciones más eficientes de cara a su optimización pudiendo, como en un ejemplo real, alcanzar ahorros del 29% en consumo de energía y del 80% en emisiones de CO2 en un centro educativo público de 3.200 m2 de la provincia de Pontevedra.
Conscientes de la necesidad de apoyar estas iniciativas, las distintas administraciones ponen en marcha periódicamente campañas con ayudas económicas dirigidas a acciones específicas: aprovechamiento de energías renovables, renovación de equipos, rehabilitación energética de envolventes, etc., que pueden cubrir un porcentaje importante del coste total. Estas ayudas requieren que la iniciativa a subvencionar esté definida mediante un proyecto que justifique, desde un punto de vista del uso de la energía, el beneficio obtenido con la actuación planteada.
Los ingenieros técnicos industriales disponemos de una elevada cualificación que nos permite garantizar el éxito del proyecto, la instalación y el mantenimiento de las soluciones de eficiencia energética. Nuestra formación multidisciplinar, tanto respecto a la capacitación técnica como al conocimiento de las soluciones disponibles en el mercado, nos permite abordar los problemas de eficiencia energética con un enfoque amplio, considerando todas las alternativas disponibles para seleccionar la más adecuada en cada caso.
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Conjuntamente, empresas, particulares y profesionales debemos trabajar mano a mano para afrontar con éxito el desafío que supone la actual transición hacia una sociedad descarbonizada, donde la energía utilizada se aproveche al máximo, y el coste de la energía se ajuste al confort obtenido con su uso.
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