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Educación desoye a los padres y mantiene junio para la recuperación

Jóvenes hacen cola ante un instituto. Rafa Vázquez

Ni el rechazo de las dos asociaciones de progenitores de la pública ni los peros introducidos en el debate por sindicatos como Anpe o UGT en la mesa sectorial de ayer, centrada en un único, pero controvertido punto, el calendario escolar, fueron suficientes para convencer a la Consellería de Educación de retirar su plan de adelantar la recuperación extraordinaria en ESO, 1º de Bachillerato y 1º de FP Básica, hasta ahora relegada a septiembre, al mes de junio, antes de las vacaciones. La propuesta de la Xunta recibió el apoyo de sindicatos como CIG-Ensino o CC OO.

CIG-Ensino defiende que el cambio de los exámenes extraordinarios para junio “puede tener más ventajas que inconvenientes”, si bien matiza que la medida por sí sola no basta si no se acompaña de actuaciones dirigidas a reducir el fracaso escolar que consideren además reducción de ratios y horario lectivo de los docentes, impulso a su coordinación, mejora de los planes de refuerzo para el alumnado y reorientación de los currículos. En el caso de CC OO Ensino, su representante, Luz López, manifestó un apoyo “rotundo” a la apuesta de Educación al entender que tiene “más pros que contras”, recoge Europa Press.

Pendiente de aprobación definitiva

De la mesa sectorial la propuesta presentada hace una semana por la Xunta y, según la Administración, avalada por la Xunta Autonómica de directores, salió en principio como entró, aunque está todavía pendiente de su aprobación definitiva: los más pequeños de la casa, hasta primaria más especial empezarán el 8 de septiembre y una semana después los mayores (ESO, Bachillerato, FP). Todos tienen el mismo horizonte para finalizar, el 21 de junio, pero la fecha incluye ya el período de recuperación para la “repesca”, prevista por la Administración gallega del 17 al 21. Los sindicatos cuestionaron que el calendario incluya 176 días lectivos, uno por encima del mínimo de la normativa, y pidieron recortar esa jornada. Trasladan que obtuvieron el compromiso de la Xunta de que estudiaría sumar a las vacaciones navideñas el 22 de diciembre.

Sindicatos como Anpe o UGT expusieron sus recelos ante el adelanto de la recuperación. Anpe reclamó la necesidad de abrir un debate “en profundidad” sobre el tema a partir de un estudio “detallado” de los pros y contras que puede suponer una medida de tal calado. Al respecto, alegan que ha funcionado con desigual suerte en comunidades que lo han probado y cuestionan si el alumnado que no pudo superar el curso en el período ordinario pueda “alcanzar las competencias” que se le requieren en dos semanas.

Además, Anpe también señala que a partir del 6 de junio está prevista la evaluación ordinaria para los alumnos de los niveles educativos en los que se adelanta la convocatoria extraordinaria, por lo que se pregunta qué ocurrirá con los estudiantes que superen las materias a partir de esa fecha y hasta que finalicen en teoría las clases, una preocupación que también comparten los padres de Confapa Galicia, quienes planteaban si aquellos que aprueban de forma ordinaria el curso seguirían o no yendo al centro “no se sabe bien a qué ni por quién estarían atendidos”.

A Anpe le “preocupa especialmente ya que en ningún sitio se indica que se vaya a impartir currículo”. Entienden que eso supone “un prejuicio” para el alumnado que “se esforzó por superar todas las materias” y cuestionan que ocurrirá con ellos esos doce días si no están recibiendo docencia y “teniendo un trimestre reducido a 33 escasos días aprovechables”. Creen que existe una clara “descompensación” en la duración de los trimestres: 71, 62 y 45 días a los que, dicen, se restarían 12 que van del 6 de junio al 21.

Al respecto, el secretario nacional de CIG-Ensino, Suso Bermello, indicaba al argumentar su acuerdo con el adelanto, sobre todo ante la posibilidad de contar con dos semanas de refuerzo impartidas por parte del mismo profesorado del curso y “sin el lapsus del verano”, informa Europa Press. Lo mismo apunta Luz López, para quien se debe garantizar que son los mismos docentes que dan clase en el curso quienes se encarguen del refuerzo al alumnado para afrontar la prueba extraordinaria.

Calendario escolar

Los progenitores de la pública rechazan la medida y cuestionan que en un debate en el que está en juego un tema “familiar” no se les consulte y en cambio se lleve a una mesa sectorial, de carácter laboral. Sin embargo, según trasladaron sindicatos, Educación defendió ayer su confianza en las modificaciones propuestas para el calendario y en relación al adelanto al mes de junio apela a los efectos “beneficiosos” que puede traer a la comunidad educativa. Por ejemplo, tal y como argumentó hace una semana, sostiene que el alumnado “tiene más posibilidades de recuperación”.

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