El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se ha sumado esta mañana a la indignación generalizada por el uso, en un auto judicial, del argumento de que una madre vive en "la Galicia profunda" para darle la custodia a su expareja, que reside en Marbella. Cuando el Parlamento gallego ultimaba una declaración de condena, Feijóo publicó la mañana de este martes un mensaje en sus redes sociales en el que tiraba de retranca y de álbum familiar. Desde que el domingo estalló la polémica, han sido muchos los políticos gallegos que se han pronunciado al respecto.

"Algunas expresiones no son las más afortunadas. Yo fui un niño de la Galicia profunda y... ni tan mal!", escribió el presidente autonómico acompañando el breve texto con una vieja foto suya en un carro, empujado por su abuela Eladia. Criado en la pequeña localidad de Os Peares, es habitual que el mandatario popular se presente a sí mismo como un "niño de aldea".

Si Feijóo tiró se retranca y de leve nostalgia, el Parlamento gallego ha sido bastante más contundente. La Cámara ha aprobado este martes una declaración institucional en la que censura los "prejuicios y estereotipos" que recoge el fallo de un juzgado de Marbella que otorgó la guardia y custodia de un menor de 13 meses a su padre, tras reprochar a la madre una actitud "deplorable" al llevarse al menor a un pueblo de la "Galicia profunda", una valoración "peyorativa" que considera "inadmisible".

Ya antes, varios políticos se habían pronunciado al respecto, como Ana Pontón —fue el BNG el que impulsó la declaración parlamentaria—, o el presidente de la Diputación de A Coruña y aspirante al liderar el PSdeG, Valentín González Formoso.