Elemento denostado, e incluso, despreciado durante mucho tiempo, la imagen de las algas ha cambiado por completo en la ría de Arousa durante la última década, al convertirse en un complemento más de la buena mesa. De hecho, cofradías como la de A Illa cuentan con planes específicos de extracción para un considerable número de variedades que acaban siendo cocinadas en puntos muy alejados del planeta.

Todos estos datos fueron los que se pusieron encima de la mesa en las jornadas que ayer acogió el Instituto Galego de Formación en Acuicultura (Igafa), unas jornadas que se centraron en todo el proceso que existe desde la extracción de las algas en el fondo de la ría de Arousa hasta su llegada a la cocina.

Para hablar de la extracción en el fondo de la ría de Arousa se contó con el submarinista en apnea del pósito de A Illa Daniel Otero, que desmenuzó cual era su plan de trabajo para las diferentes especies que extraen.

Así, los submarinistas de A Illa tienen un plan específico de 85 días anuales en los que han llegado a extraer hasta 245 toneladas, convirtiendo O Xufre en uno de los puertos de referencia en lo que respecta a la comercialización de algas. Aunque cuentan con permiso para extraer siete especies diferentes, las algas que cuentan con un mayor tirón en la comercialización son el wakame, el combo y la lechuga de mar. Estas especies no solo suponen un interesante aporte económico para los submarinistas, sino que les evita someter a su principal recurso, la navaja, a una sobreexplotación. La Cofradía de A Illa lleva ya nueve años comercializando este producto, ampliando en cada campaña el número de toneladas extraídas.

En las charlas también se contó con la presencia de representantes de las empresas comercializadoras Algamar y Portomuiños, que explicaron cuales son los mercados en los que las algas de la ría de Arousa han desembarcado y son apreciados.

Una de las propuestas más atractivas de las jornadas fue la protagonizada por el cocinero con una Estrella Michelín, Jorge Olleros, y los alumnos del Carlos Oroza, que elaboraron diferentes platos en los que las algas eran uno de los ingredientes principales, en especial, la lechuga de mar. Olleros aprovechó el foro para reivindicar la calidad de los productos de la ría de Arousa, y en especial de las algas que se extraen en esta zona.

En las jornadas también participó la directora xeral de Desenvolvemento Pesqueiro, Susana Rodríguez, que destacó el trabajo realizado por el Igafa en la recopilación de algas en todo el litoral de Galicia, una labor que se reflejó en la exposición que ha acogido el centro en las últimas semanas y en la que se podían ver 79 especies diferentes. Rodríguez también valoró de forma muy positiva la celebración de las jornadas como elemento de divulgación entre el alumnado y el profesorado de la importancia de las macroalgas como recurso económico y sus perspectivas de futuro.