No es novedad, el mundo sigue girando a pesar del coronavirus. Una prueba de ello en la llegada esta mañana del primer crucero del año al puerto olívico: el Viking Venus pedía paso a primera hora de la mañana para para amarrar sus 227 metros de eslora a tierra firme. El Puerto de Vigo inaugura de esta forma la temporada de cruceros con la primera gran escala del año.

El Viking Venus es el buque oceánico más reciente construido por la compañía Viking, botado en 2021. El barco salió el pasado miércoles día 5 de Barcelona, y tras su paso por Cartagena y Málaga, arribó en la Estación Marítima a las 08.00 horas con 325 pasajeros -en su mayoría americanos- y 436 tripulantes a bordo. Los buques oceánicos de Viking tienen un tonelaje bruto de 47.800 toneladas, con 465 camarotes que pueden alojar a un total de 930 huéspedes.

Quien no o haya ido a ver ya no podrá hacerlo, porque el buque tenía previsto partir al mediodía rumbo a Portsmouth, para culminar su singladura en Londres el próximo miércoles, día 12 de enero.

El Puerto recupera su pulso

El presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Jesús Vázquez Almuiña, quiso dar la bienvenida al capitán del buque, Torbjorn Stenkula, en una breve ceremonia de intercambio de metopas.

En este acto, el máximo responsable portuario, señaló el 2022 como el año de la recuperación del tráfico de cruceros en Vigo. La Estación Marítima espera la llegada de cerca de 90 transatlánticos de grandes dimensiones, lo que supondría la arribada de, aproximadamente, unos 175.000 pasajeros.

Vázquez Almuiña aprovechó para dar la bienvenida al capitán del buque FDV

Unas cifras que, según destacó, superarán a las registradas en la última década en lo que a escalas de cruceros se refiere. De hecho, según apuntó, desde las 103 registradas en el año 2012, ningún año se han superado las 83.

Lo mismo sucede en el caso de los pasajeros llegados a bordo de un crucero: habría que remontarse al año 2015 para encontrarnos con cifras superiores a las estimadas para 2022.