Con la puesta en marcha de las Posadas-Jardín de O Salnés la Diputación de Pontevedra "pretende contribuir a la inserción social y laboral de personas con discapacidad, a través de la accesibilidad, el diseño para invidentes, la participación en trabajos", por lo que a lo largo de los senderos de cada jardín, en cada una de las cuatro posadas proyectadas, "se eliminarán todo tipo de barreras arquitectónicas, los carteles informativos se colocarán atendiendo a criterios de estética e integración al entorno, con especial interés a las personas con discapacidad visual, incluyendo textos en braille, y la creación de los jardines estará especialmente concebida para que estas personas, a través de los olores, el tacto y el sonido de la naturaleza, puedan disfrutar de la belleza de un entorno privilegiado".

Estas explicaciones del ente provincial son aplicables a la Pousada da Lanzada, a la de Armenteira (Meis) y a la de Meaño, de las que ya se habló en días pasados. Pero también a la Pousada de Ribadumia, que hoy corresponde analizar.

En este caso se dice que dicha instalación hotelera, ubicada en Santa Eulalia de Ribadumia, "cuenta con una localización privilegiada" y es "un ejemplo de una arquitectura contemporánea respetuosa con la tradición, que persigue el disfrute de los espacios naturales y del patrimonio cultural e histórico, teniendo en cuenta la accesibilidad, la integración con el paisaje y el aprovechamiento de los recursos".

Es un edificio "que se desarrolla en distintos volúmenes que se adaptan a la topografía existente, partiendo de unas necesidades funcionales y de relación con la propia parcela y su entorno".

Como sucede en las demás posadas, dichos volúmenes "se comunican entre sí a través de unos recorridos accesibles que permiten en todo momento la relación directa con el espacio exterior", tomándose como referencia en el sistema constructivo del inmueble "el sistema tradicional de emparrados que ordenan nuestro territorio".

Así lo hace constar la Diputación en su análisis de las diferentes posadas, aludiendo a esta de Ribadumia como "un espacio dotado de 26 habitaciones dobles con baño, completamente accesibles y con unas magníficas vistas; cafetería; servicio de cafetería y restaurante con terraza y acceso directo desde el exterior; salón social con terraza; zona ajardinada totalmente accesible, de 2.165 metros cuadrados; pabellón multiusos, dotado de acceso directo desde el exterior; y plazas de aparcamiento adaptadas".

Al desmenuzar estos elementos se aclara, por ejemplo, que el servicio de cafetería y restaurante "cuenta con terraza y acceso directo desde el exterior; es completamente accesible y adaptado, tanto en cuanto a su diseño y dimensiones como en lo relativo al diseño y disposición del mobiliario; y cuenta con un aforo aproximado de 84 personas".

Del salón social con terraza se explica que "es completamente accesible y adaptado en cuanto a su diseño y dimensiones, así como en su diseño y la disposición del mobiliario; cuenta con un aforo aproximado de 35 personas".

Cuando los promotores de las Pousadas-Xardín de O Salnés las presentan en sociedad se refieren a la de Ribadumia como una buena forma de disponer de 24 habitaciones dobles con baño y 2 habitaciones dobles con baño y terraza, todas ellas "con unas magníficas vistas".

Y dicho esto puntualizan que "las dimensiones del dormitorio y el diseño y ubicación de los elementos de mobiliario garantizan su accesibilidad a todas las personas", sin olvidar que "el baño es completamente accesible, debido a las dimensiones de éste, así como al diseño y disposición de los elementos sanitarios y de las ayudas técnicas".

Cuando se desglosan los servicios generales y de alojamiento destacan que "todos los servicios del hotel cumplen con los requisitos básicos de accesibilidad, circulación, comunicación y utilización".

A lo que suman, en el caso del aparcamiento, que "está situado en superficie en un recinto propio en el que dispone de 18 plazas, siete de las cuales son adaptadas según sus dimensiones, situación, señalización y características; los espacios de circulación que conectan el aparcamiento con la Pousada, son completamente accesibles".

De los recorridos exteriores vinculados al hotel se dice que son, igualmente, "completamente accesibles, al igual que los elementos de comunicación, señalización y los dispositivos de aviso, como timbres e interfonía, que se encuentran dentro de este recorrido".

El vestíbulo y la recepción de la Pousada de Ribadumia se proyectaron con un diseño que "permite el cómodo acceso a todas las personas, incluso portando equipaje, bultos o carros de maletas". Y no menos llamativo resulta que "todos los espacios de circulación, como pasillos, distribuidores, rampas, escaleras y ascensores, que conectan unos espacios con otros, son completamente accesibles". Y lo mismo puede decirse de los aseos, "a los que se puede acceder desde cualquier dependencia pública del hotel".

Uno de los elementos que pueden diferenciarla de otras Pousadas es que la de Ribadumia "cuenta con un pabellón multiusos, completamente accesible y adaptado, que tiene un aforo aproximado de 285 personas y dispone de acceso independiente, por lo que puede funcionar para servicios vinculados a esta posada o para la realización de actos organizados por otras".

Al igual que se hace en los demás casos, al explicar las características de la Pousada de Ribadumia se alude a una serie de itinerarios u ofertas complementarios, es decir, lugares o rutas de los que va a poder disfrutar el usuario.

En este caso destaca la recomendación de las excavaciones arqueológicas del Monte de O Castro. Y en este sentido la Diputación argumenta que "a pesar de ser un yacimiento conocido por los vecinos de Ribadumia, en este monte no se habían hecho grandes intervenciones arqueológicas", que sin embargo gozan de un gran protagonismo en la actualidad. Se trata de "un poblado fortificado de la Edad del Hierro, y por los restos documentados puede decirse que este lugar estuvo habitado entre los siglos IV a. C. y I d. C.".

Las sendas fluviales de los ríos Currás, Umia y Cañón son otras recomendaciones formuladas por el ente provincial, que se refiere a la Pousada de Ribadumia como una instalación "ubicada en el corazón de O Salnés destinada al turismo que es ejemplo de una arquitectura contemporánea respetuosa con la tradición, que persigue el disfrute de los espacios naturales, teniendo en cuenta la accesibilidad".

Estos y otros detalles del proyecto de Pousadas do Salnés están muy presentes también en las redes sociales. En facebook, sin ir más lejos, se explica que con esta iniciativa la comarca "ofrecerá más posibilidades de ocio durante todo el año y atraerá a otros tipos de público a la zona".

Se plantea la idea como "un auténtico impulso económico para la comarca, ya que también hay en marcha un plan de promoción de empleo y formación". Y todo ello "adaptado para el disfrute de todos, promoviendo un turismo sin barreras que será un referente en el ámbito internacional". Las mismas fuentes puntualizan que el proyecto Pousadas "es un plan de dinamización gestionado por la Diputación para la creación de un turismo accesible y sostenible en O Salnés; su puesta en marcha abarca la creación de establecimientos turísticos accesibles en su totalidad, rutas por la comarca que se intercomunican con las Pousadas y excavaciones arqueológicas".