La gran playa de Sanxenxo —y a la vez espacio natural protegido, que comparte con O Grove—es la de A Lanzada, la de las nueve ondas y también testimonio de la presencia de los primeros pobladores de estas tierras, que sigue en fase de estudio. Está plagada de leyendas y rituales pero también de elementos terrenales como las dunas que la rodean –kilómetros de fina arena– y la ermita románica en torno a la que se celebra una multitudinaria romería a finales de agosto. A Lanzada tiene mucho que contar. Durante meses se han llevado a cabo excavaciones arqueológicas que han puesto de manifiesto que aquí existió una importante ciudad abierta al orbe entre el siglo V antes de Cristo y el V de nuestra era. Un centro comercial del mundo antiguo que mantuvo la ruta entre el Mediterráneo oriental y el Atlántico incluso después de la desaparición del Imperio romano y que sigue aportando valiosa información sobre cómo vivían sus pobladores , aficionados al marisco y a la pesca, y que puede visitarse con los propios arqueólogos como guías de excepción en la que es una iniciativa pionera en Galicia de acercar el pasado a todos los públicos -alanzada.

Apacible en verano, en invierno el viento y los temporales dan lugar a espectaculares juegos de olas y espuma. Sus inmediaciones son un compendio de historia y naturaleza: la isla de Ons, las grutas naturales, la vegetación, la torre, el castro y la ermita de Nosa Señora da Lanzada. Son más de dos kilómetros de arenal a mar abierto y cuenta con un paseo de madera que permite oxigenar cuerpo y espíritu. Orientada al sur, al borde se encuentra la ermita, u n templo románico en origen y que perteneció a la fortaleza que, en 960, fue construida por orden del obispo compostelano Sinando a fin de evitar los ataques normandos. La ermita es de nave única y con abside semicircular donde se encuentra una bella imagen de la Virxe de A Lanzada. El fuerte, del que sólo quedan restos, fue destruido durante las guerras irmandiñas del siglo XV. En la zona donde actualmente se encuentra el templo se encontró una necrópolis que constituye una de las primeras evidencias de la presencia de la vida humana en Galicia. Asociado a A Lanzada está el tercer fin de semana de agosto, fecha de la romería y de la tradición del baño de las nueve olas, el mítico ritual de la fecundidad.

Cómo llegar Por la C-550 desde la capital provincial. También por la Vía Rápida do Salnés.