Carlota Corredera despierta críticas en Twitter durante sus vacaciones por una foto en bañador que lució durante sus vacaciones con su marido, David Valldeperas.

La periodista viguesa se involucró en la serie documental de Rocío Carrasco hasta el punto de llegar a calificar a quienes se mostraban escépticos con su testimonio como "negacionistas de la verdad".

El impacto socia de la emisión de la entrevista que condujo la copresentadora de Sálvame fue irrefutable, lo avalan los datos vertidos por el Ministerio de Igualdad que indican un ascenso de un 61% de las llamadas al 016 (el teléfono de atención a las víctimas de violencia de género).

Victoria Rosell, delegada del Gobierno en esta materia achaca las 7.213 denuncias del mes de marzo a las declaraciones en televisión de la hija de Rocío Jurado.

Corredera, abrumada, tomó conciencia de que su trabajo la comprometía con el movimiento feminista y se implicó en la defensa de quien ahora es su amiga y confía en su versión de los hechos.

Su actuación en los platós es coherente con su postura, arremete y argumenta contra todos aquellos que la ponen en duda.

La opinión de la periodista es inamovible y se muestra indiferente ante las críticas de los detractores de su amiga.

La polémica foto de Carlota Corredera en bañador

La posición de la audiencia de Telecinco está muy polarizada y no admite la escala de grises, por lo que quienes se implicaron en el conflicto son odiados o queridos dependiendo del bando en el que se posicionen, por lo que provocan reacciones en la audiencia en cada paso que dan, incluso en vacaciones.

La revista Lecturas publicó una fotografía en su portada de Carlota Corredera en bañador, una publicación habitual con los rostros conocidos en verano, y su repercusión fue sobresaliente dada su exposición mediática en los últimos meses.

Los usuarios de redes sociales hablaron sobre la portada y algunos criticaron el físico de la presentadora, pero la reacción de la mayoría de los usuarios fue acallar estas voces y defender a la presentadora sin importar que su trabajo les guste o no.

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"Me están dando vergüenza de los tweets que estoy leyendo sobre Carlota (...) tiene su carrera de comunicación y periodismo se ha ganado lo que tiene por méritos propios", alegó una usuaria.

La oleada de tuiteros que defendió a la periodista seguían esta línea argumental y consiguieron acallar a las voces que la descalificaban por su aspecto.