Las piscinas naturales forman un recurso único en el que no ha intervenido la mano del hombre sino para acondicionar unas escaleras, pasarelas o un trampolín. Son zonas de baño, hoy en auge, para los viajeros que buscan autenticidad. Espacios estancos en los que penetra el agua del mar o brota un manantial o circula un río. Ahí van las mejores piscinas naturales que hemos encontrado repartidas por todo el mundo:

Cenote Ik Kil (México)

Esta piscina y parque natural es uno de los sitios más espectaculares de Yucatán. Ubicado a tres kilómetros de la zona arqueológica de Chichén Itzá, a solo hora y media de Mérida y a 25 minutos de Valladolid, el cenotre Ik Kil es visita obligada de la mayoría de tours que se ofrecen a los visitantes de la Rivera Maya.

Además de sus profundas aguas azules, otro de los atractivos de este lugar es la vegetación exótica que cae como cascadas en el centro del cenote. Asimismo, cuenta con una fauna muy variada entre la que podemos observar todo tipo de peces de colores y aves silvestres.

El precio de entrada al cenote de Ik Kil es de aproximadamente 80 pesos mexicanos (3.60 €). A este precio tendrás que sumar casi seguro el de una taquilla y si no eres muy bueno nadando, el de un chaleco salvavidas. Un lugar y experiencia magnifica para todo amante de la naturaleza.

La Laguna Azul (Islandia)

Se trata de una de las atracciones turísticas más populares de Islandia. La Laguna Azul o Blue Lagoon se encuentra en el suroeste de Islandia, a 39 km de Reykiavík y a 13 km del aeropuerto internacional de Keflavík.

Destaca por ser un balneario geotérmico de aguas turquesas situado en un campo de lava en Grindavík, y es considerado además una de las 25 maravillas del mundo por el National Geographic. La temperatura de sus aguas, a unos 37ºC, contrasta con la temperatura exterior de 10ºC, convirtiendo el baño en una experiencia única.

Sus aguas poseen virtudes curativas y, según los dermatólogos islandeses, son de gran ayudar para aquellas personas afectadas por psoriasis. Estas aguas termales son únicas como ecosistema, ya que están compuestas en gran parte por agua de mar (2/3) y tan sólo 1/3 por agua de lluvia, cuando normalmente las aguas geotermales están compuestas por agua de lluvia. Habitan tan solo ciertas especies de microrganismos como bacterias y algas verdiazules, puesto que las precipitaciones de silicio impiden el crecimiento de más organismos.

Termas de Saturnia (Toscana)

Saturnia es considerado como el mejor destino termal del mundo y año tras año abarca un gran número de visitantes. Desde lo alto de una llanura del valle de Albenga, domina el mágico paisaje de la zona interior de Grosseto, entre rocas de toba y verdes llanuras.

Las leyendas cuentan que las Termas de Saturnia se originaron tras el enfado de Saturno con los humanos que lanzó rayos contra el Monte Amiata e hizo surgir agua sulfúrea. Estas aguas compuestas por azufre, sulfato, carbono y bicarbonato alcalino poseen además propiedades benéficas y terapéuticas extraordinarias.

Sus piscinas naturales escalonadas con pequeñas cascadas, situadas en un hermoso enclave natural, le otorgan a este lugar toda su espectacularidad. La temperatura de las aguas es de 37ºC y posee un caudal constante, convirtiéndolo así en un lugar idóneo para el baño.

Los que en seguida han apreciado su belleza y la calidad de sus estructuras han sido sobre todo los turistas extranjeros, que han hecho de ella un destino privilegiado para pasar unas vacaciones en Italia.

El charco azul (Islas Canarias)

El charco azul, en la isla de El Hierro, es una de las zonas de baño más espectaculares de la menor de las Islas Canarias. La lava y la incansable erosión de las olas han creado esta piscina natural de aguas turquesas, que posibilita el baño con el sonido del mar como música de fondo.

Se encuentra en la mitad de El Golfo, que es como se conoce a la costa de la isla de El Hierro, y es un compendio que consta de dos magníficas piscinas naturales de agua salada. Pero lo realmente peculiar de este bello lugar, es que están inmersas en una cueva, con un arco basáltico, en donde rompen las olas y produce un sonido envolvente y una espuma blanca.

El acceso es totalmente gratuito y no tiene horario establecido, pero para llegar hasta el lugar debemos recorrer un sendero durante 20 minutos.

Cascada Kravice (Bosnia Herzegovina)

Las cascadas de Kravica están formadas por un conjunto de pequeñas cataratas de origen calcáreo de unos 30 metros de caída, por las que se precipitan las aguas el río Trevizat. Sus paredes están rodeadas de vegetación, formando un jardín vertical repleto de césped, líquenes y musgo. Las aguas afloran formando un arco ocupando una extensión de unos 200 metros.

A los pies de estas cascadas, se forman unas pozas de aguas cristalinas, donde el baño es particularmente agradable en verano, donde las temperaturas pueden llegar a alcanzar los 40ºC.

Este lugar se encuentra a tan sólo unos pocos kilómetros de la ciudad de Ljubuski, con una situación muy próxima a Medjougore, el punto de peregrinación más popular del país. No obstante, actualmente no existe ningún tipo de servicio de transporte público por las inmediaciones y el lugar es difícil de hallar. Lo más habitual es ir acompañados por un guía profesional en un tour contratado en Ljubuski.

Pamukkale (Turquía)

Es una zona natural y al mismo tiempo una atracción turística al sudoeste de Turquia, concretamente en el valle del río Menderes, en la provincia de Denizili, donde se disfruta de un clima templado la mayor parte del año.

Consta de 17 pozas de agua de manantial de color turquesa, a una temperatura de 35ºC. Estas aguas; con su alto contenido en roca caliza, bicarbonato y calcio, al correr por la montaña y asentarse, dan el particular color blanquecino al monumento natural que parece nieve o espuma. De ahí su nombre, pues Pamukkakle es una palabra turca que significa castillo de algodón.

A pesar de estar a punto de desaparecer por la construcción de hoteles y el turismo masivo, quienes poco a poco contaminaron las aguas, la Unesco las declaró Patrimonio de la Humanidad en 1988, frenando así su deterioro.

Las fuentes de Algar (Alicante)

Las fuentes de Algar están situadas a tan sólo 15km de Benidorm y a 3km del centro urbano de Callosa d’en Sarrià, y constituyen un parque natural muy bien conservado, puesto que fue declarado Zona Húmeda protegida por Acuerdo del Gobierno Valenciano de 2002.

El paisaje es fruto del modelado kárstico de la roca caliza y forma cascadas espectaculares. Consta de numerosas fuentes manantiales que brotan de la roca, remansos de agua en donde se pueden tomar refrescantes baños de aguas puras y cristalinas (antiguamente consideradas como “fuente de salud”), la antigua presa, el imponente canal y las acequias centenarias todavía hoy en uso.

Baños de la Reina (Alicante)

En la localidad costera de El Campello (Alicante) encontramos unas piscinas naturales con mucha historia. Su nombre se debe a una leyenda que dice que las mandó hacer una reina mora para poder bañarse en el mar, alejada del oleaje. Sin embargo, se tratan de balsas para peces o piscifactorías de la época romana. Se encuentran tras un yacimiento arqueológico, la Illeta del Banys, de más de 5.000 años de antigüedad y de los más importantes del Mediterráneo.

Actividades como snorkel o la práctica de saltos son muy comunes en esa zona, no obstante, se recomienda extremar la precaución.

Grotta della Poesia (Italia)

La Cueva de la Poesía es una formación natural producida siglos atrás en Roca Vecchia, donde nos podemos dar un baño rodeados de una leyenda. Dicen los habitantes de la zona que en tiempos lejanos había una princesa que, por motivos del destino, se transformó en una musa divina. Lejos de esconderse, la princesa-musa tenía la costumbre de darse largos baños en la Cueva de la Poesía, lo que provocaba que decenas de artistas, escritores de multitud de estilos, la visitaran para observarla desde los alrededores y así recibieran una fuerte dosis de inspiración. Es por ello por lo que recibió este nombre tan identificativo por el cual todavía se la conoce hoy día.

Esta cueva rodeada por rocas es un auténtico lujo rural. Compuesta de agua cristalina y limpia, se haya en una zona de fácil acceso en la comarca de Salento. Si estamos buscando un buen lugar donde hacer fotos o grabar buenos vídeos con una cámara, este es sin duda un buen sitio.

Semuc Champey (Guatemala)

Este lugar, uno de los destinos más suspirados por las personas que visitan Guatemala, contiene aguas de color turquesa, impresionante paisajes y exuberante vegetación. Esta ubicado en el municipio San Agustín Lanquín, en el Parque Natural Semuc Champey.

Semúc Champey es un manantial que cae sobre el techo de una cueva que se ha formado durante el pasar de los años, alimentado por manantiales que bajan de las montañas de casi 500 metros de altura. Es de recalcar que el lugar llamado el Sumidero, es un lugar altamente peligroso, si caes al río, este te puede arrastrar.