Una triste noticia removió a los alumnos de Segundo de Primaria del CEIP Chancelas hace unos meses. Chuli, la perrita del párroco de Raxó se quedaba sin hogar después de que falleciera su dueño y la Canceira de Poio se hacía cargo de ella para ponerla en adopción. Fue entonces que los escolares descubrieron la función de las protectoras, una oportunidad que su tutora, Patricia Pousada, aprovechó estas inquietudes para iniciar un proyecto en el que tratar desde la cercanía esta problemática. El colofón de este aprendizaje fue ayer cuando voluntarios de la canceira los visitaron ayer junto con Teo, un perro muy sociable, para resolver sus dudas.
Pousada explica que los pequeños “tenían alguna ligera idea del tema, pero tampoco entendían la diferencia entre adoptar y comprar” y concluye que se han implicado mucho en la causa y han concienciado a sus familias.
Durante estos meses han esto haciendo folletos con consejos para las personas que quieran adoptar y carteles en contra del abandono y promoviendo la adopción que la Canceira quiere proponer al Concello usarlos en una campaña. Ahora continúan haciendo anuncios de cada uno de los perros de la protectora que grabarán para la televisión del colegio.
Los escolares llegaron a la cita con mil dudas para las voluntarias “¿Los perros están tristes en la canceira? ¿Cuántos hay? ¿Por qué los abandonan? ¿Cómo podemos ayudarles” fueron solo algunas de ellas.
“Aprender tiene que tener un sentido y hoy -por ayer- vieron que todo el trabajo que hicieron sirvió para algo y vieron la importancia que tiene. Decían que fue el mejor día de su vida en el cole y que quieren ir de excursión a la canceira”, comenta Pousada.
Por parte de la canceira la voluntaria Patricia Rodríguez incide en la importancia de que entiendan que un animal es una responsabilidad desde estas edades. “Fue una sorpresa muy grata porque los vimos muy conscientes del problema siendo tan pequeños. Es muy esperanzador verlos tan implicados, con tantas inquietudes. Lo más importante es que tomen conciencia de lo que significa adoptar un animal porque el día de mañana serán quienes eviten el abandono”, comenta.
La mayor duda de los alumnos era si adoptar, acoger y comprar es lo mismo: “Les explicamos qué es una acogida y por qué es importante darles una segunda oportunidad. Nos sorprendió mucho porque ellos mismos llegaron a la conclusión de que si compras apoyas que se haga negocio de los animales sin saber cómo los cuidan”, apunta Rodríguez.
Además, la canceira los invitó a ir a pasear a los perros con algún adulto ahora que se han retomado los paseos los sábados o domingos por la mañana o algún otro día avisando previamente y prometieron ir.
Ahora la canceira quiere iniciar una campaña con sus carteles y acercarse también a otros centros escolares para poder seguir concienciando a los más pequeños, que serán quienes cambien el mundo.
