Más de 400 corredores participaron ayer en la salida organizada por la parroquia Virgen del Camino para recaudar fondos para Cáritas y los damnificados por el terremoto que asoló Haití el pasado mes de agosto. Bajo el hashtag #CorreXCaritas, los participantes buscaban micropatrocinadores que aportaron 1 euro por cada 100 metros recorridos, una iniciativa de éxito que ayer convocó a cientos de espectadores en la Illa do Covo.
Éstos fueron precisamente la sorpresa de una jornada pensada para los más jóvenes. Se habían establecido itinerarios en función de las edades y sorprendió la masiva afluencia de mayores, que se pusieron la camiseta de la carrera más por espíritu colaborador que realmente deportivo.
Entre ellos, caras conocidas como la del presidente de la Autoridad Portuaria, José Benito Suárez, uno de los que acudió a la Illa do Covo para expresar su apoyo a Cáritas.
Especialmente divertido fue el calentamiento que precedió a las salidas de las carreras. Se convirtió en un animado baile colectivo, más que en el previsible ejercicio precompetivivo
La alegría y el clima festivo fue una de las notas definitorias de la jornada, potenciada por el buen tiempo en este final de noviembre. El párroco de Virgen del Camino e impulsor de la iniciativa, Alberto Domínguez Munáiz, hace un balance muy positivo de esta cita en la que “familias, adultos y niños hemos disfrutado y luchado a tope”, señala.
El párroco de Virgen del Camino e impulsor de la iniciativa, Alberto Domínguez Munáiz, hace un balance muy positivo de esta cita en la que “familias, adultos y niños hemos disfrutado y luchado a tope”, señala el sacerdote
Se celebraron 3 carreras para distintas edades con 290 inscritos de modo oficial, si bien finalmente corrieron más del doble si se suman las tres categorías, para niños de 5 a 8 años, preadolescentes de 9 a 13 y a partir de 14 años para los jóvenes y adultos.
Especialmente divertido fue el calentamiento que precedió a las salidas de las carreras. Se convirtió finalmente en un animado baile colectivo, más que en el previsible ejercicio precompetivivo.
Asimismo, el buen tiempo de la jornada animó a numerosos pontevedreses a calzarse las zapatillas de deporte o, al menos, a acudir al céntrico espacio natural para animar a los participantes.
Por lo que respecta a la recaudación, el sacerdote explica que “todavía la desconocemos porque debemos contar la recaudación realizada en el banco” (ya que muchos participantes realizaron aportes mediante Bizum y transferencias) pero da por plenamente conseguidos los objetivos de la carrera.
Señala especialmente a los objetivos de “sensibilizar y traer la justicia que brota de la fe en Cristo Jesús” y a la labor pedagógica que supuso el evento “como parte de la fe cristiana”.
En una jornada animada por el buen tiempo y tras el esfuerzo físico, los corredores pudieron disfrutar de un avituallamiento a base de fruta, aguas y un tentempié
También incidió especialmente en el apoyo a Haití (los fondos ayudarán a mantener un dispensario médico en este país que ha sufrido recientemente una nueva catástrofe natural) y a las familias usuarias de Cáritas-Virgen del Camino.
Tras el esfuerzo físico, los corredores pudieron disfrutar de un avituallamiento a base de fruta, aguas y un tentempié. Fue el colofón a una jornada que contó con la colaboración de distintos agentes, caso de los voluntarios de Cruz Roja, que ayudaron al éxito de una jornada en la que se combinó diversión, deporte y afán por ayudar.
