A medio camino entre infraestructuras imprescindibles y verdaderas obras de arte, así son los puentes que conectan y transformaron Galicia, del mismo modo que sucede con los faros que salpican su costa.

La orografía de la comunidad ha hecho imprescindibles a lo largo de a historia la construcción de estas vías. Con el paso de los años, el diseño de los puentes se ha sofisticado y en la actualidad conviven obras medievales con otras creaciones punteras de la ingeniería.Todas ellas, útiles y hermosas a su manera. Aquí van 10 de estos extraordinarios puentes.

Puente de hierro en Os Peares, ¿obra de Eiffel?

En una localidad que se encuentra entre dos provincias, cuatro municipios y cruzada por tres ríos, los puentes se vuelven imprescindibles. Hablamos de Os Peares, uno de los lugares con distribución más curiosa de la comunidad. Allí encontramos este particular puente de hierro por el que transcurren las vías del tren y cuyo diseño se ha atribuido a la Escuela de Eiffel, el mismo al que pertenece la torre más popular de París. Aunque esta teoría parece desmentida por algunos, el puente de hierro de Os Peares destaca como una importante infraestructura que contribuye a la vertebración de Galicia.

Puente sobre el río Verdugo en Soutomaior. // A. Pinacho

Puente colgante de Soutomaior

Sobre el río Verdugo de Soutomaior se encuentra uno de esos puentes colgantes de vértigo.

Construido en madera, se eleva seis metros sobre el nivel habitual del río y cruza la profunda Poza das Bestas. Además de las vistas desde el centro de la construcción, ofrece la posibilidad de disfrutar de una pequeña playa fluvial situada en uno de los laterales.

Puente de Gundián. // Bernabé/Luismy

Puente de Gundián

El viaducto de Gundián permite salvar el paso del río Ulla en Vedra, concretamente en la parroquia de Ponte Ulla. Como parte del trazado de la antigua línea ferroviaria Zamora-A Coruña, se convirtió en una de las obras civiles más importantes del siglo XX en Galicia.

Su apariencia resulta imponente, con una altura de 219 para una construcción en piedra sobre un entramado de hierro y entre dos paredes con unos 50 metros de caída vertical. Sin duda, uno de los pasos más representativos de toda esta vía.

Viaducto del Ulla. // I. Abella

El viaducto sobre el Ulla del Eje Atlántico

Conectando Catoira con Rianxo se encuentra una de las más excepcionales obras de ingeniería civil del corredor Atlántico Español, el viaducto sobre el Ulla. Y no es una percepción subjetiva, ya que esta infraestructura fue reconocida como mejor obra civil gallega en el Premio San Telmo 2015, además de otros reconocimientos internacionales como el "Outstanding Structure Award 2016" de la International Association for Bridge and Structural Engineering

Puente de A Illa de Arousa

En 1982 el ministro de Obras Públicas de aquel entonces daba luz verde a una obra que haría despegar A Illa de Arousa. Tres años de trabajo y el equivalente a seis millones de euros de inversión hicieron posible este puente de 1.980 metros que daba respuesta a una larga reivindicación del pueblo de la isla. Supuso un importante crecimiento social y económico, aunque en este momento vuelve a concentrar algunas protestas por su estado actual.

Puente O Buergo. // Gustavo Santos.

Puente del Burgo

Una de las imágenes más significativas de Pontevedra pasa por el Puente del Burgo, que cruza el río Lérez a su paso por la ciudad. Las primeras referencias de esta construcción datan del año 1165 y hasta la actualidad es una vía fundamental.

Puente internacional de Tui

El 25 de marzo de 1886 se inauguraba el antiguo Puente Internacional que une las ciudades de Tui y Valença do Minho. A lo largo de más de 130 años ha sido una de las columnas vertebrales que ha unido ambos países, contribuyendo a iniciativas como la Eurocidade que hoy forman las dos localidades conectadas.

Vista de Ourense con el Puente del Milenio y el Puente Romano. // Brais Lorenzo

Puente Romano de Ourense

Aunque solo conserva algunas piedras en la base de la construcción de la época de Augusto, el Puente Romano de Ourense es igualmente una obra de arte. Cruzando el río Miño, comunica el barrio de A Ponte con el centro de la ciudad a través de sus 370 metros de largo que se sostienen en siete arcos. En pleno día, al atardecer o por la noche con su espectacular iluminación, ofrece una de las imágenes más emblemáticas de la ciudad.

Puente del Milenio

Y si el Puente Romano de Ourense supone la cara más histórica de la ciudad de As Burgas, el Puente del Milenio se ha convertido con el paso de los años en señal inconfundible del skyline ourensano. Diseñado por el arquitecto Álvaro Varela, aporta una dosis de vanguardismo con sus sinuoso perfil y su imponente escalinata.

Puente de Rande. // Alba Villar

Puente de Rande

No podía faltar. El Puente de Rande supuso un antes y un después además de convertirse en uno de los emblemas de la ciudad y la Ría de Vigo. Con un precio inicial que superó los 3.650 millones de pesetas, su construcción se desarrolló entre el 1973 y el 1978, pero no fue hasta el 1981 que se abrió a tráfico. Desde entonces, más de 230 millones de vehículos han cruzado esta obra de la ingeniería, que tampoco ha estado exenta de polémica.