Soldados armados vigilando unas calles totalmente solitarias, transitadas por ambulancias de las que salen unos seres que parecen extraterrestres, y ciudadanos que rompen el silencio todos los días a la misma hora aplaudiendo desde las ventanas de sus casas. Todo esto compone una escena distópica, inimaginable hace ahora un año, aunque ahora nos parezca casi natural.

Coronavirus en Vigo | El Ejército patrulla Vigo para garantizar el estado de alarma

Coronavirus en Vigo | El Ejército patrulla Vigo para garantizar el estado de alarma CEDIDO

La epidemia de COVID-19 en Galicia nos deja una serie de imágenes que nunca se borrarán de nuestra memoria y que con suerte contaremos a nuestros nietos.

Del asombro inicial, de la extraña sensación de estar viviendo en una película de catástrofes, pasamos al horror de la enfermedad y la muerte en los hospitales y las residencias, a la gratitud infinita a los sanitarios y otros trabajadores esenciales, y finalmente al hastío producido por la fatiga pandémica, de la que solo podrá sacarnos la ciencia a través de las vacunas. La esperanza en la inmunización es una luz cada vez más poderosa al final de un túnel demasiado largo y que ha cambiado nuestras vidas por completo, llevándose a 2.268 gallegos e infectando a más de 113.000, además de arruinar a muchas familias.

La tragedia, el absurdo y el dolor, pero también la solidaridad y la esperanza, se unen en esta selección de fotos de la epidemia en Galicia.